La mala noticia es que va a sustituir al fogoso Davide Giugliano en la estructura oficial del Ducati Aruba.it Racing debido a un accidente sufrido durante los entrenamientos de esta semana en el circuito australiano, fracturándose las vértebras L1 y L2.

El incidente ocurrió en la curva número 11, cuando el piloto italiano “salió por orejas” de su Panigale R, provocando su desplazamiento inmediato al Hospital Alfred en Melbourne, donde se le diagnosticó esta delicada lesión.

Un revés para la escuadra italiana porque Davide se había mostrado muy rápido con la nueva moto en un circuito muy del agrado piloto italiano para el que se ha establecido un periodo de descanso de 90 días tras su llegada a Italia, lo que supone su adiós prematuro a la lucha por el título.

Esto obligó al equipo a emitir un comunicado sobre su baja a la vez que anunciaba la cesión de una Panigale R para que Troy Bayliss disputase la carrera en el circuito que mejor conoce. Estas eran las palabras del australiano:

“Lo primero que quiero decir es que lo siento mucho por Davide, es una lástima comenzar así la temporada. El deseo de correr de nuevo delante de la afición y los ducatistas, ha sido muy fuerte desde que me retiré. Además Phillip Island es uno de mis trazados predilectos y este año cumple su 25º aniversario en el calendario del Mundial de SBK, por eso pensé que sería una ocasión perfecta para correr como wild-card y volver a trabajar con los técnicos de Ducati. Será un fin de semana difícil porque hace ya un tiempo desde la última vez que piloté una superbike pero conozco bien el circuito y espero que tras unas vuetas recupere las buenas sensaciones. Lo importante es que logre divertirme, coja los máximos puntos posibles y pueda brindar un buen espectáculo al público”.

Este inesperado aliciente pondrá aún más interés si cabe en esta primera cita mundialista del WSBK que recupera a uno de los iconos del certamen que llevaba siete años retirado y seguro que no pasará desapercibido.