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Esta es la moto con la que Kawasaki quiere marcar su propio camino, una senda que abandona la lógica y recupera la pasión por la tecnología al servicio de una máquina deportiva diferente, donde la turbina cobra un protagonismo especial en su motor y el estilo evidencia que estamos ante una moto con una personalidad salvaje y singular.Con un peso de 238 kg (con todos los líquidos) y una potencia máxima de 210 CV con el ram-air a pleno pulmón, las credenciales de la H2 “descafeinada” imponen respeto pero no asustan, tal y como sucede con la Kawasaki Ninja H2 R de circuito.
Al ser matriculable para circular por la calle ha adaptado su transgresor estilo para acoger elementos imprescindibles como porta matrícula, espejos retrovisores e intermitentes.
La turbina
En cuanto a la mecánica hay que aclarar que no estamos ante un motor con turbo que funciona con la presión de los gases de escape sino que el propio propulsor hace girar una turbina a través del cigüeñal desde el momento que se pone en marcha. Es importante la actuación del ram-air ya que el motor alcanza muy altas temperaturas derivadas de los gases de escape y por eso se ha diseñado un conducto desde el frontal por el lado izquierdo con un amplio caudal que garantice aire fresco para mantener un rendimiento óptimo y constante. Además gracias a este sistema se prescinde de un intercooler que sumaría más peso y volumen al entramado mecánico.El resultado de estas y otras particularidades del propulsor con turbina desarrollado por los ingenieros de Kawasaki motos y sus filiales Gas Turbine & Machinery Company, Aerospace Company y Corporate Technology Division, es la clave da una moto que promete 210 CV a 11.000 rpm y un par de 133,5 Nm a 10.500 rpm.
La electrónica
Y una moto así necesita una parte ciclo así como una electrónica a la altura. Hablemos primero de esto último…Su piloto encontrará abundante tecnología a su servicio ya que cuenta con una larga lista de serie en la que no echamos nada en falta.
Control de tracción con diferentes niveles de intervención, concretamente cuatro: uno para circuito, dos para calle, tres para superficie deslizante y modo lluvia. Este último puede ser conectado o desconectado de forma independiente y limite el par, la aceleración y la entrega de la potencia, reduciéndola hasta en un 50%.Kawasaki Launch Control Mode es el asistente con el que contaríamos para hacer fuertes aceleraciones desde parado evitando que le rueda delantera se levante o la trasera patine.
Kawasaki Engine Brake Control es un dispositivo que permite seleccionar la cantidad de freno motor que el piloto prefiere, sobre todo si decide entrar en circuito que es donde esto puede proporcionar una conducción todavía más eficiente.
El ABS deportivo es el mismo que usa la Kawasaki Ninja ZX-10R pero ha sido revisado para adaptarlo a los parámetros de la H2. Las pinzas de anclaje radial Brembo se encargan de darle al freno delantero la potencia y tacto necesarios.
Y también cuenta con cambio rápido quick shifter así como amortiguador electrónico de dirección formado por Öhlins.
Con todo este arsenal electrónico la Kawasaki H2 se sitúa a la vanguardia de las motos deportivas y además supone una revolución dentro de la propia fábrica ya que estrena en su parte ciclo un chasis tubular así un basculante monobrazo exclusivos en las deportivas de Kawasaki.
La suspensión es totalmente regulable tanto para la horquilla delantera invertida de 43 mm como para el monoamortiguador trasero que puede además ajustarse para alta y baja velocidad. Esto permite buscar siempre la máxima efectividad en cualquier condiciones de uso.
El efecto espejo
Pero lo que más llama la atención es la puesta en escena de la Ninja H2 que conserva intacto el estilo de la R aunque sustituye su escape por uno muy parecido al de la Kawasaki Z1000 2014. De todos modos Kawasaki ya ha dispuesto un Akrapovic menos voluminoso y bastante más estético para sustituir el original si el cliente así lo desea.La Ninja H2 está pintada con una innovadora técnica que logra un efecto espejo plateado en el depósito, el frontal y el colín que potencia la sofisticada imagen que proyectan las marcadas formas de la Ninja H2, un rasgo imprescindible en su impactante y original estética.
No se ha hablado nada del precio pero todos los rumores parecen indicar que superará los 20.000 € pero no por mucho margen, aunque hay que esperar la confirmación ya que todavía no tiene fijada una fecha de puesta a la venta.
