Cada motorista tiene sus manías, de ahí que Seventy Degrees haya optado por lanzar unas botas touring disponibles en dos tamaños de caña: caña alta, las SD-BT2; y caña media, las SD-BT3, que son las que hemos probado.

Se trata de unas botas de piel con acabados en poliuretano y nylon, y con un forro de poliéster para conseguir la máxima transpirabilidad. Además, incorporan la membrana impermeable y transpirable WinterTex, propia de la marca española, para que el frío y la lluvia no enturbien una jornada de ruta en moto.

Las protecciones de las SD-BT3 se encuentran en la zona del tobillo, mientras que la zona de la espinilla, talón y dedos disponen de refuerzos. Por otro lado, los puntos de flexión también se han reforzado y la parte trasera y la lateral incluyen inserciones reflectantes.

botas seventy degrees sd bt3El cierre se realiza mediante una cremallera lateral y velcro, para un mejor ajuste y protección al agua y al viento.

Opinión botas Seventy Degrees SD-BT3

Aunque Seventy Degrees considera sus botas SD-BT3 como touring, lo cierto es que por diseños y protecciones podríamos encuadrarlas también como unas botas para motos trail. Es más, para los usuarios más aventureros, las SD-BT2 de caña alta les resultarían ideales. 

Esto implica que resulten más rígidas que las clásicas touring de todo cuero sin protecciones de plástico, algo que puede gustar más o menos, depende de cada uno, pero que ofrece una sensación de seguridad muy alta. Además, no resultan incómodas aunque es cierto que hay que probarlas bien antes de comprarlas porque dan poca talla y son algo estrechas de pie. Las que he probado son exactamente de mi número, pero sin margen hacia arriba. Es decir, si vuestra talla se mueve entre dos números, elegid la de mayor tamaño.

botas seventy degrees sd bt3 detalleLa entrada y salida del pie se realiza de manera sencilla, y una vez el pie está dentro resultan cómodas, se nota para bien las zonas flexibles en el empeine. En cambio, la parte de la espinilla requiere de un tiempo de adaptación porque parece que hay mucho hueco entre la pierna y la bota, dando la sensación de que no se ha apretado bien el velcro de la parte superior. Pero es que están pensadas para meter un pantalón por dentro de ellas y enseguida te acostumbras a tener ese espacio ya que la bota va bien sujeta.

Su precio es de 120 € -135 €, las de caña alta- y están disponibles en color negro y en color marrón, en un guiño a los usuarios que también salen del asfalto para disfrutar de la moto.