Es habitual que las principales marcas del sector trabajen mano a mano con los mejores fabricantes de equipamiento para, además de mejorar su imagen de marca, ofrecer a sus clientes complementos de alta calidad que podrán lucir a juego con su moto. Por todos es conocida la estrecha relación entre Arai y Ducati o, sin ir más lejos con Honda; junto a la que ha lanzado varias ediciones especiales del Arai RX-7 con decoraciones HRC o inspiradas en los modelos más icónicos de la firma o de reciente aparición.
En esta ocasión el binomio Arai/ Honda se ha lanzado a homenajear el arma con la que el gigante nipón pretende asaltar desde este 2020 el trono de la categoría WorldSBK con la ayuda de Álvaro Bautista y Leon Haslam, la nueva Honda CBR1000RR-R Fireblade.
El modelo elegido para tal efecto, como no podía ser de otra manera, es el Arai RX-7V. El casco deportivo por excelencia en el catálogo Arai que, pese a la llegada de su última evolución - el reciente RX7-V Racing- sigue siendo un “primer espada” en la oferta de cascos sport. Un casco con unas excepcionales cualidades en un uso intensivo, gracias a su acertada circulación del aire en su interior, que cumple con los más altos estándares en materia de seguridad; a la altura de la nueva CBR y avalado por un incontable número de pilotos profesionales que han confiado en él a lo largo de los años.
Disponible en tres acabados diferentes, negro/plata y otras dos que combinan el característico contraste rojo/azul de HRC de manera diferente, los tres acabados cuentan con unos elegantes gráficos en los que se adivina el icónico “ala dorada” de Honda. Todas ellas coronadas por sendos logos del departamento de competición de la marca, sustituyendo el tradicional óvalo blanco de Arai, añadiendo el toque racing a esta edición especial.
