¿Renovarse o morir?¿O simplemente mejorar? Parece más probable esto último, pues ya pasaba al motor de Piaggio alimentado por carburador la normativa europea anticontaminación vigente, la Euro3. Y hay otra razón más poderosa; ya le tocaba porque habían recibido la inyección electrónica tanto la Vespa LX como la S.

Este nuevo sistema de alimentación añade un toque de refinamiento al motor y de paso algo más de potencia y par a más bajas revoluciones , alegrando la vida a éste pequeño scooter urbano. Concretamente, la potencia se sitúa en 10,7 CV frente a los 10,3 CV del modelo anterior, y el par alcanza la misma cifra pero llega antes, con 9,6 Nm a 6.500 rpm en lugar de a 7.500 rpm. Se mantienen las dos válvulas por cilindro, el sistema de distribución monoárbol y la refrigeración mediante aire forzado.

Con la inyección electrónica se logra mejorar el tacto del motor, sobre todo a baja velocidad, a la vez que aceleramos con algo más de brío. Estéticamente, únicamente las letras “ie” diferenciarán éste nuevo modelo del alimentado mediante carburador. Su precio aumenta ligeramente, tan sólo 100 euros de diferencia entre la nueva LXV y la versión S, es decir 3.300 €.

vespa-lxv-125-ie-grande