Así lo ha confirmado el Director del Servei Català de Trànsit, Joan Josep Isern que ha mostrado su preocupación por el incremento del número de fallecidos por accidente de moto, y considera que esta medida podría contribuir a mejorar la seguridad de los motoristas, sobre todo en carretera a las horas de menos luz.
Por eso Isern va a solicitar a la DGT en septiembre que se imponga de forma obligatoria el uso de una pegatina reflectante en el casco, algo similar a lo que se hace en Francia, donde deben llevarse prendas por ley bajo sanción de 135 € y tres puntos del carné. No sabemos si las multas acompañarían la iniciativa en nuestro país pero sí sabemos el gran rechazo que ha causado en Francia, donde lo ven más como un agresivo método recaudatorio que como un mecanismo para salvagardar sus vidas.
Para impulsar la medida, el Tránsit prevé repartir 10.000 pegatinas para el casco de forma gratuita, aprovechando los controles específicos de los Mossos d'Esquadra para la motocicleta (Premot) desde este fin de semana.
Estos son los números que se manejan para justificar la implantación de esta norma: mientras que la cifra de muertos en general ha caído un 35%, de 122 a 79, la cifra de motoristas muertos ha experimentado un aumento importante de 15 a 22, lo que además supone el 28% del total de víctimas mortales registradas. Según los datos de Trànsit, el perfil de víctima en 2013 es un hombre, de entre 31 y 40, y de entre 51 y 60, y los accidentes son salidas de vía y choques con otros vehículos. La mayoría eran a primera hora de la mañana o de la tarde.