Era un rumor de las últimas semanas y faltaba la confirmación oficial que acaba de llegar en forma de comunicado por parte de Peugeot Scooters.
PSA quiere buscar una salida con futuro a su división de dos ruedas en un entorno poco favorable en Europa, donde las ventas son cada vez menos significativas dentro del panorama internacional, sobretodo en comparación con los volúmenes que se manejan en otros continentes que han pasado a tirar de las ventas a nivel mundial.
Uno de los puntos calientes de la motocicleta se encuentra en India, donde algunos fabricantes europeos de toda la vida ha llegado ya a acuerdos con empresas locales para implantarse en el país, con fábricas e incluso gamas de modelos expresamente pensadas para satisfacer la demanda interna de esta región emergente. Según el comunicado,
la falta de volumen en el mercado europeo hacía cada vez más difícil una estrategia competitiva en solitario para Peugeot Scooters, y este acuerdo con el gigante industrial indio Mahindra & Mahindra permitirá abrir nuevos mercados y dinamizar la marca con nuevas gamas de modelos, probablemente abriendo la fabricación y el abanico de proveedores a este país.
Frédéric Fabre, Director General de Peugeot Scooters, ha declarado que este plan
“aclara el futuro de Peugeot Scooters. Hay primero un plan de recuperación de la actividad que es primordial. Más allá de la colaboración estratégica con el Grupo Mahindra & Mahindra nos daría la oportunidad de acelerar nuestro desarrollo geográfico.” La empresa india aportará
15 millones de euros que servirán para la financiación de proyectos y la dinamización de la marca y al final del proceso, que no sea detallado ni en sus hitos ni en duración,
Mahindra & Mahindra será propietaria del 51% de las acciones de Peugeot Scooters; es decir que ostentará el control de la compañía.
No obstante, la intención expresada en el comunicado es compatibilizar la necesidad de una inyección de recursos con la continuidad del empleo y las
raíces francesas de la marca, para lo que hoy mismo se ha presentado desde la dirección un plan de bajas incentivadas -denominadas según el comunicado “senior”- que afectará a 80 trabajadores, pero con la intención de mantener la operatividad de la factoría de Mandeure.