> Asegura tu moto con nosotros al mejor precio ¡Compruébalo!

Los resultados arrojados por el estudio realizado en Estados Unidos por la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en Autopistas (NHTSA) no pueden ser más concluyentes: Durante 20 meses se investigó una muestra de nada menos que 10.858 conductores, comprobando que conducir después de fumar un porro no supone un incremento significativo de las posibilidades de sufrir un accidente de tráfico.

Conducir después de consumir cannabis (marihuana o hachís) bajo los efectos de la sustancia activa de esta planta denominada THC, la responsable de sus efectos sobre la conducta,

Es más peligroso conducir en el margen tolerado de alcohol que haber fumado un porro
tiene una influencia del 5% de riesgo con respecto a la completa sobriedad, mientras que ponerse al manillar o volante con una cantidad de alcohol en sangre de 0,5 gramos por litro -el límite legal en España- ya supone duplicar el riesgo de accidente, es decir, un 100% más de riesgo.

La investigación profundiza en la cuestión, y considera que dados estos valores resulta muy aventurado sancionar a quienes dan positivo en cannabis en los controles de droga en EE.UU. porque es una sustancia que permanece en la sangre durante varias semanas, a diferencia del alcohol u otro tipo de drogas, que además restan mucho más peligrosas para la capacidad de conducción.

¿Qué pasa en España si fumas porros y conduces?

En nuestro país la ley prohíbe la venta y la tenencia pero no el consumo de hachís. Sin embargo, en los recientemente instaurados controles de drogas se ha establecido una tolerancia cero para todas las sustancias, sin pararse a diferenciar sus efectos.

En el caso de que en uno de estos controles alguien de positivo en cannabis se enfrenta desde hace unos meses a una sanción de 1.000 euros y 6 puntos del carnet, mientras que si se da positivo en una alcoholemia, pero con 0,5gr/l o menos no pasará absolutamente nada; como mucho el típico “no beba más” del agente.

Sin duda, si nuestras autoridades quisieran hacer las cosas bien tendrían dos alternativas: prohibir completamente el consumo de alcohol y drogas, derogando los actuales márgenes de tolerancia en el consumo de bebibidas alcohólicas al volante, o contar con un sistema que permita medir el nivel de THC, estableciendo a partir de qué punto su consumo influye negativamente en la conducción. Desde luego como están ahora las cosas lo más probable es que se estén cometiendo muchas injusticias contra conductores que no suponene ningún riesgo en el tráfico. Quizá incluso todo lo contrario: se ahorrarían pitidos en los atascos y conductas agresivas...