Esta temporada la hemos visto casi siempre en lo más alto del posium, protagonizando una campaña irreprochable que seguro no la podían esperar en Yamaha, al menos con tanta suficiencia. Lleva logradas nueve victorias de once posibles y a falta de siete carreras hay algo ya seguro: Yamaha va a lograr el campeonato de pilotos y constructores.

Por eso es buen momento para dar un repaso a sus características que no a sus secretos técnicos, muy bien guardados y responsables de una eficacia que ninguna otra moto de la parrilla es capaz de ofrecer en este momento. No se trata de la moto más veloz en recta y no le hace falta; su comportamiento está siendo impecable en todo tipo de trazados y condiciones, mostrando ésa manejabilidad ya famosa acompañada de una estabilidad frenadas y un paso por curva que la están haciendo imparable.

Y la nota más evidente de que estamos ante la mejor moto de MotoGP es el rendimiento de sus dos formidables y experimentados pilotos oficiales que se están repartiendo las victorias de forma incontestable pero también el equipo satélite Tech3 está protagonizando una buena temportada, sobre todo Bradley Smith. Por eso se merece que la veamos con detenimiento...