Esta vez el casco propone un escena submarina en la que Rossi es el pez chico al que amenaza una gran boca de tiburón con ojos malévolos y ganas de engullirlo. Pero la mirada de determinación del pequeño pez amarillo y el Vai, Vai, Vai! (Vamos, Vamos, Vamos!) en los laterales anuncian que no se va a dejar coger. Un mensaje que seguro no cae en saco roto, sobre todo en el otro lado de su box, donde está Jorge Lorenzo, la principal amenaza para el décimo título de Rossi.

El propio Aldo Drudi, diseñador del casco, ha afirmado que el motivo marítimo se ha buscado porque el GP de corre muy cerca del mar, de la Riviera de Rimini, y querían enmarcar el mensaje y la creatividad en un divertido fondo marino.

Sin duda el italiano sabe lo duro que va a ser doblegar a Jorge en la lucha por el Mundial de MotoGP 2015, ya lo dijo hace poco en Silverstone tras ganar la carrera. "Jorge es muy duro". Y el piloto balear lo es, todo el mundo lo sabe, sobre todo cuando se encuentra con la confianza necesaria en su pilotaje y su moto, como es el caso.

Dos mentalidades ganadoras con una puesta en escena diametralmente diferentes reflejadas en el nuevo casco de Valentino Rossi que añade otro divertido y genial capítulo a su afición por los cascos de fantasía.