Lo importante es que el piloto balear no está descartado para la carrera, de hecho ya está en Tokio, adonde ha viajado con el brazo en cabestrillo. Esto ha disparado las alarmas pero el entorno de Jorge asegura que la lesión no es grave aunque se trata del mismo hombro que tantas veces se ha lastimado durante su carrera.
La caída que le ha ocasionado el esguince en el hombro ocurrió ayer sábado mientras entrenaba. Jorge notó un fuerte dolor que le puso en alerta y rápidamente acudió a los médicos que tras las preceptivas radiografías le han diagnosticaron un esguince de ligamentos. Esto afecta a la movilidad del hombro pero con los que intervienen en el movimiento de levantarlo, algo que no afecta especialmente a la conducción de una moto.
Esta lesión no ha podido llegar en peor momento porque comienza el periplo de carreras que llevará a los pilotos de Japón a Australia y luego a Malasia, todas ellas con solo una semana de diferencia, con lo que el descanso va a ser prácticamente nulo.
Los 14 puntos que de desventaja con Rossi de repente cobran más peso con una merma física de por medio pero recordemos que Lorenzo no se achanta frente a este tipo de sucesos, como ya demostró en Assen 2013, y tira de casta para sobreponerse a las adversidades. Esperemos que esta vez no sea un excepción y esta lesión no eclipse el emocionante duelo que se preveía entre él y Rossi por el título a falta de cuatro carreras.
