Un estudio publicado por la empresa MSI (Sistemas de Inteligencia de Mercado) en colaboración con María José Moral, profesora e investigadora de la UNED ha logrado hacer un dibujo del comprador de motos y scooters en España, basado en el nivel económico y el carácter de la zona.
El nivel de renta es un factor decisivo a la hora de comprar una moto porque esto determinará, no sólo el tipo de moto sino también la inversión que se realiza. Pero la evolución del mercado de las dos ruedas en España en los últimos años revela que el grueso de las ventas ha tendido hacia un producto económico y de menor gasto. Esto ha heho que la cuota de scooters haya pasado del 43,6% en 2008 al 66,8% en 2015. Las motos de gama alta se mantienen en torno al 10%.
Aunque la nueva coyuntura económica está haciendo perder fuerza a los scooters de 125 cc y está favoreciendo la compra de motos de media y al ta cilindrada de carretera.
Pero lo revelador de este estudio realizado usando características socio demográficas es qué estratos de la población y qué zonas aportan más ventas al sector. El estudio divide en cinco grupos a los compradores y analiza los datos desde el año 2008. Los grupos son los siguientes:
- Alto nivel económico
- Nivel económico medio
- Bajo nivel económico
- Zonas Rurales
- Zonas turísticas
Como se puede ver en la gráfica, el nivel económico medio (color granate) acapara la inmensa mayoría de las ventas ya que las rentas más bajas (color verde oscuro) apenas tienen incidencia en la compra de motos. Y sorprendentemente, los individuos con más nivel adquisitivo (color azul oscuro) tampoco tienen una gran incidencia en el mercado aunque han ganado cuota en los dos últimos años.
Por supuesto la mayoría de ellos se agrupan en zonas urbanas pero tanto la áreas rurales como las turísticas también tienen un importante peso específico en el las ventas del sector.
Es evidente que el alquiler de scooters en las áreas con turismo tira de forma significativa de las ventas y esto se ha afianzado durante los dos últimos años.
Por su parte las zonas rurales también tienen incidencia significativa en las ventas de motos y aunque tendieron a contraerse con el comienzo de la crisis, se han estabilizado en los últimos cuatro años.