Ya fue la moto oficial en 2015 y repite en 2016, demostrando que pese a ser una moto más bien modesta, su lógica y robusez la hacen perfecta para una ruta tan exigente como la que van a recorrer los ciclistas, con 21 etapas en las que se encontrarán 51 puertos de montaña, algunos de ellos lo más duros que hay en toda nuestra geografía nacional.
La polivalenvia de este modelo es determinante para poder adaptarse a las exigencias de una carrera con tantos escenarios diferentes, y de hecho han tenido que ser adaptadas para ofrecer el servicio que precisan los profesionales que cubren La Vuelta España: una ligera subida del asiento respecto al manillar proporciona al motorista una posición más erguida y facilita los movimientos sobre la moto.
También la comodidad es crucial para no acusar la fatiga tras cinco o seis horas encima de la moto y la V-Strom 650 evidencia que su ergonomía general es apropiada y permite a los profesionales hacer su trabajo con el mayor confort posible. Un asiento grande y bien mullido es fundamental así como unas suspensiones con el tarado adecuado.
La Vuelta a España comienza el próximo 20 de agosto en Orense y termina el domingo 11 de septiembre en Madrid. Y como una gran vuelta que es, contará con los mejores equipos del mundo y una excepcional aliada en carrera, la Suzuki V-Strom 650.
