La entrada en vigor de la normativa Euro4 en enero de 2017 ha supuesto la aparición y renovación de muchos modelos, y, además, un cambio importante en lo que se refiere a la limitación de motos para poderse conducir con el carnet A2 de moto.

Lo que decía la normativa hasta ahora era que un usuario del carnet A2 podía conducir cualquier moto que no superase 35 kW (48 CV) y con una relación potencia peso inferior a 0,2 kW/kg. También se permitía pilotar motos limitadas a 35 kW siempre que el motor de origen no doblara esta potencia, es decir, siempre que el motor de la moto de la que deriva no superase los 70 kW (95 CV).

En 2017, con la entrada en vigor de la Euro4, la situación cambia y se establece una nueva categorización de las motos, que es la siguiente:

  • L3e-A1 (motocicletas de hasta 125 cc de cilindrada y 11 kW de potencia).
  • L3e-A2 (más de 125 cc de cilindrada y una potencia entre 11 y 35 kW).
  • L3e-A3 (más de 35 kW de potencia).

Lo que fija la nueva normativa es que los cambios de potencia, que hasta ahora se consideraban limitaciones, pasan a ser transformaciones y es una acción que sólo pueden llevar a cabo los propios fabricantes antes de la matriculación del vehículo. Lo que tienen que hacer los fabricantes en este caso es homologar como dos modelos distintos la misma moto, una para versión L32-A3 y otra para la L3e-A2. Serían dos motos que comparten todos sus componentes técnicos -suspensiones, frenos, carrocería, motor-, pero que se diferencian en las restricciones para no superar la potencia permitida. Algunas marcas habían tomado esta opción, pero mientras que otras directamente habían decidido no homologar para el A2 algunos de sus modelos de menos de 70 kW, por lo que el usuario con ese tipo de carnet se quedaba en principio sin poder limitarla ya que no podía recurrir a las empresas comercializadoras de kits al sólo poder llevarlo a cabo el fabricante.

Pero estas empresas lo que han venido reclamando desde el principio es que el reglamento que regula este asunto, el 168/2013 del Parlamento Europeo, habla únicamente de motos nuevas, sin matricular, pero no dice nada de las motos ya matriculadas. Una laguna legal que el Ministerio de Industria no había querido afrontar hasta el momento.

Así, llegamos al 28 de marzo, que es cuando se reúne el Motorcycle Working Group de la Comisión Europea para tratar las argumentaciones legales y técnicas de la ANFLI -Asociación Nacional de Fabricantes de Limitadores de Potencia para Motos -, por las que se pedía poder limitar las motos Euro4 en la Unión Europea como así establece la Directiva 2006/126/CE sobre el permiso A2. La propuesta finalmente era admitida y el Gobierno Español por fin ha fijado los requisitos para que estas empresas puedan proceder a limitar las motos para el A2, quedando de la siguiente manera:

  • Será necesaria la instalación de al menos dos dispositivos limitadores de naturaleza y diseños diferentes que deben cumplir con la normativa de potencia, ruido y emisiones. Si alguno de los mismos fuera electrónico, debe además cumplir con el Reglamento de compatibilidad electromagnética.
  • Otro requisito ahora exigible tiene que ver con el dispositivo antimanipulación (hilo y precintos), al que se va a prestar especial atención a través del aumento del control sobre su instalación.
  • Por último, se deberá poner una etiqueta adhesiva identificativa en la moto en la que se identifique el número de Conjunto Funcional del limitador, el número de bastidor, la potencia, ruido y el número de serie de cada precinto, para una mejor trazabilidad a efectos de las ITV.

La principal empresa española comercializadora de kits de limitación para motos del carnet A2, Atimpex, comienza a comercializar sus primeros limitadores este mismo mes de junio, siendo su intención la de proveer de kits a todas las motos del mercado que cumplan los requisitos. José Luis Martín, presidente de ANFLI y director general de Atimpex, nos confirmaba que los modelos primeros modelos disponibles son los de las Honda con motor bicilíndrico de 750cc que montan la NC750X, la X-ADV y la Integra, entre otras. También nos ha confirmado que cualquier particular puede realizar las gestiones para limitar su moto en el caso de que no exista uno en concreto para su modelo. En cuanto al precio, José Luis Martín no nos daba una cifra exacta, pero teniendo en cuenta el coste de los anteriores kits (entre 350 y 450 euros, aunque a veces las marcas ofrecían ofertas), se podría pensar que el precio del kit podría rondar los 500 euros.