La infancia de Mir ha estado marcada por las ruedas, como la de muchos de los jóvenes pilotos que pueblan las parrillas del Mundial de Motociclismo, pero en el caso del mallorquín son las cuatro de los monopatines y no las dos de las minimotos con las que solían competir desde su más tierna infancia la mayoría de sus rivales. Y es que Mir se crió entre los patines y las tablas de "skate" de las dos tiendas que su padre posee en Mallorca y se pasó hasta los diez años en los "half pipe" en vez de en los circuitos. Pero el paso por la escuela de Chicho Lorenzo, en la que duró poco tiempo, y la relación familiar con el exmundialista Joan Perelló (primo segundo) provocaba que el chaval terminase en las motos.

joan mir mundial moto3 campeon 2Comienza a competir a los 10 años, bastante más tarde que la mayoría de las grandes figuras actuales, dando el salto a motos más grandes en 2010, con 13 años, al disputar la Rookies Cup Red Bull sin tener ninguna experiencia en circuito de velocidad ni con una moto de estas características. Se clasificaba para la final al terminar entre los 50 mejores de los 140 pilotos de todo el mundo. Sus buenas actuaciones en las pruebas de selección de la cuna de Campeones Bankia y de la Rookies Cup Red Bull le valían para obtener una beca del gobierno balear. Comenzaba entonces su breve pero brillante carrera deportiva, ganando la copa Cuna de Campeones Bankia.

En 2013 y 2014 tomó parte en la Red Bull Rookies Cup (noveno y subcampeón, respectivamente), obteniendo como premio el disputar el FIM CEV Repsol en 2015 con una Ioda Honda, con la que hizo de una de las carreras más impresionantes en Le Mans, pasando de la última plaza de la parrilla a la primera en apenas ocho vueltas, aunque finalmente se iba al suelo. No pasaba nada, los principales equipos del Mundial ya le habían echado el ojo y ya ese mismo año el Leopard Racing le hace debutar en el Mundial en Australia, sustituyendo al lesionado Ono. Aunque caía al suelo, su buena actuación le valía para disputar el certamen completo en 2016, logrando su primera victoria (Austria), otros dos podios y una quinta plaza final.

Este año partía como uno de los favoritos, pero pocos se imaginaban que iba a dominar el campeonato de la manera en la que lo ha hecho. Nueve victorias y once podios a falta de dos carreras por disputarse le han valido para dar a España el título número 47 de la historia del campeonato, el décimonoveno piloto español en conseguirlo. El año que viene dará el salto a Moto2, acompañando a Alex Márquez en el equipo VDS Estrella Galicia 0,0 y tendrá una nueva oportunidad de seguir haciendo creciendo la leyenda. Pero sobre todo, de hacer ver a todos que se puede llegar a ser campeón sin necesidad de estar desde los tres o cuatro años disputando carreras de motos.