A ninguno se nos escapa que históricamente BMW ha sido una de las marcas más innovadoras, dotando a sus vehículos de un gran número de soluciones para mejorar la experiencia de los usuarios y en todo lo relativo a la seguridad. Algunos de esos avances, como el sistema de suspensión Telelever introducido en 1993 (que mejora considerablemente la estabilidad de la moto, incluso frenando en curva) se han mantenido a lo largo de los años, convirtiéndose en señas de identidad dentro del catálogo alemán.

Otros, por el contrario, han traspasado las fronteras de la fábrica de Múnich, como en el caso del ABS (presente en algunos modelos de BMW desde finales de los ‘80) o la inyección electrónica, convirtiéndose en estándares para otros fabricantes e implantándose como elementos obligatorios según las normativas actuales.

El compromiso de la firma con la seguridad se ha visto reflejado además en la constante evolución de todos los sistemas implantados. Si en 2006 lo bávaros presentaban el Control Automático de Estabilidad ASC en su referente naked del momento, la BMW R1200R, en 2010 lanzaban el Control Dinámico de Estabilidad DTC sobre la super deportiva S 1000 RR. Un sofisticado sistema que, apoyándose en una plataforma inercial, predice las pérdidas de estabilidad y despliega todas las ayudas electrónicas necesarias para evitar el desastre, incluso en un uso intensivo en circuito. Un sistema hace posible sacar el máximo partido a los 207 CV de una auténtica superbike a los pilotos más experimentados, permitiendo al mismo tiempo el acceso a este tipo de motos a pilotos con menos rodaje.

Sistema de Llamada Inteligente eCall

Otro claro ejemplo de cómo BMW ha sido la referencia en materia de seguridad en los últimos años es el eCall (Sistema de Llamada Inteligente). Un sistema que, en caso de accidente, envía la localización a los servicios de emergencia, reduciendo su tiempo de llegada al lugar del siniestro entre un 40-50% del tiempo habitual.Un sistema capaz salvar miles de vidas, especialmente cuando hablamos del mundo de las dos ruedas, y ahorrar grandes cantidades de dinero al mismo tiempo.

El eCall, presente en la gama de cuatro ruedas de BMW desde 1999 y de implantación obligatoria en todos los coches desde 2018, se introdujo como opción de fábrica en los principales modelos de BMW Motorrad desde 2017, gracias a las sinergias con la división de automóviles de la firma. Algo que se ha ido ampliando en los últimos años al resto de modelos de las gamas Trail, Sport y Touring. Y que en lo que llevamos de año, se ha implantado en el 42,3% de las motos vendidas por BMW.

Puedes conocer en detalle cómo funciona el sistema eCall de BMW, aquí.

Con esta trayectoria es fácil aventurarse a afirmar que proyectos como la futurista Vision DC Roadster o el sistema de conducción autónoma de una moto, en los que se encuentra inmersa la firma actualmente, marcarán un antes y un después en un futuro cercano en el universo motociclista.