El equilibrio perfecto. Así es como Suzuki ha decidido calificar a la renovada Hayabusa que regresa al nido 22 años después de su nacimiento, actualizándose a las últimas exigencias en materia de contaminación y poniendo al día tanto el apartado mecánico como el estético para que volvamos a disfrutar de la grandiosidad del halcón peregrino.
Manteniendo su contundente y aerodinámica silueta -fruto de horas y horas de desarrollo en el túnel del viento- la tercera generación de la Hayabusa afila sus rasgos y se presenta con un aspecto más musculoso. Unas formas que se reflejan tanto en el diseño de su carenado, el colín trasero, como en la nueva pareja de escapes -2 kg más ligeros que en el modelo anterior- respetando, al mismo tiempo, las líneas originales de la Hayabusa de principios del milenio.
1.340 cc dispuestos a hacerte volar
Pese a los rumores que apuntaban a la posibilidad de asistir al estreno de una Hayabusa equipada con motor con algo más de capacidad, junto a un chasis totalmente nuevo, finalmente la firma ha decidido confiar en la base que equipaba la generación anterior, llevando a cabo ligeros ajustes.
El propulsor mantiene la misma cilindrada (1.340 cc) motivo por el cual, tras la obligatoria actualización a la Euro5, ve reducidas ligeramente sus prestaciones, con una cifra de potencia de 190 CV a 9.700 rpm (197 en la segunda generación), acompañándolo, eso sí, de un contundente par motor 150 Nm a 7.000 rpm, disponible en la gama media de revoluciones. Unas cifras que, pese a lo que pudiéramos pensar, permiten a la nueva Hayabusa presentarse como la más rápida en la historia del modelo. Un ajuste en la sincronización de los dos árboles de levas (evitando así la superposición de apertura de las válvulas), bielas y pistones más ligeros y mejoras en la cámara de combustión, contribuyen a hacer de esta afirmación una realidad. Junto con una evolucionada electrónica, inédita hasta ahora en el modelo.
Del mismo modo que ocurre en la GSX-R1000R, la “Busa” equipa la nueva versión del sistema SIRS (Suzuki Intelligent Ride System) que trabaja conjuntamente con una IMU de 6 ejes, gestionando el soberbio despliegue tecnológico que acompaña a esta nueva generación: Suzuki Drive Mode Selector Alpha -encargado de gestionar los diferentes modos del motor- control de tracción, control de freno motor, anti-wheelie, control de salida, quickshifter bidireccional, control de velocidad de crucero, sistema de arranque en pendiente, ABS en curva…
Una nutrida selección de ayudas que podremos controlar a través del “cockpit”, que mantiene el clásico esquema de cuatro esferas analógicas, integrando una pantalla TFT entre el tacómetro y el velocímetro que incluso incorpora un indicador del ángulo de inclinación.
Más ágil
Como ya mencionábamos, el chasis doble viga de aluminio permanece sin cambios, con respecto a la serie anterior, no así el subchasis que ha sido ligeramente modificado. Un equipo de suspensiones Kayaba se encarga de que la moto se peque bien al suelo, mientras que estrena material Brembo en el eje anterior (Tokico en la generación anterior) con unas potentes pinzas radiales monobloque Stylema (Nissín en la parte posterior).
En definitiva, una Hayabusa más ligera y manejable que seguirá volando bajo acariciando la barrera de los 300 km/h. Una moto que llega acompañada de una promoción de lanzamiento, con motivo de la celebración del 100º aniversario de la firma, que rebaja su precio hasta los 19.595 € (frente a los 21.995 € que costará) -junto a 4 años de garantía y 4 años de asistencia en carretera con coberturas Premium- para los que realicen la reserva de alguna de las 25 primeras unidades.
Disponible en tres decoraciones diferentes -Glass Sparkle Black & Candy Burnt Gold, Metallic Matte Sword Silver & Candy Daring Red y Pearl Brilliant White & Metallic Matte Stellar Blue- la nueva Suzuki Hayabusa llegará a nuestro país durante el próximo mes de marzo.
