Presente en el catálogo alemán desde 2014, la S 1000 R representa el componente más radical entre las naked de la “Bayerische Motoren Werke”. Un modelo que debe todo su ADN deportivo a la, hasta ahora, superbike de referencia de la firma S 1000 RR -que este año ha dejado paso a la más evolucionada M 1000 RR- de la que hereda su propulsor, así como un buen número de componentes.
Para este 2021, aprovechando la obligatoria adaptación de su propulsor a la normativa Euro5 -sin perder ni un ápice de su incuestionable potencial- BMW ha decidido poner al día varios apartados para mantenerla en liza entre las principales maxinaked del mercado. Para ello, además de reducir drásticamente su peso (6,5 kg) situándolo por debajo de los 200 -gracias a las profundas modificaciones efectuadas tanto en su cuatro cilindros de 999 cc como en su chasis Flex Frame, ahora más estrecho y compacto- la nueva S 1000 R aprovecha las últimas evoluciones de la S 1000 RR beneficiándose de una nueva IMU de 6 ejes que gestiona su completo paquete de ayudas: control de tracción dinámico, ABS Pro, tres modos de conducción, Hillstar control, así como los modos de conducción Pro, control dinámico de freno motor, launch control y arranque en pendiente (disponibles de manera opcional).
Una S 1000 R que estrena un diseño más actual y dinámico, con una ergonomía mejorada, en el que toman gran parte de protagonismo su nueva óptica frontal rediseñada y los nuevos paneles laterales, que emparejan algo más su imagen a la versión deportiva S 1000 RR de la que deriva.
Un nuevo panel de instrumentación formado por una imponente pantalla TFT a color de 6,5”, completa las novedades de la nueva maxinaked alemana, que está disponible en la red de concesionarios oficiales BMW Motorrad bajo pedido a un precio de 16.370 € .
