Como ya os anunciamos a finales del año pasado, el fabricante británico Triumph regresa de manera oficial a la competición esta temporada para participar en el Campeonato Británico de Supersport del Grupo Quattro. Y, lo más impactante, es que lo hará apoyándose en las altas capacidades de su naked de corte deportivo de cilindrada media, la implacable Street Triple RS.
Un movimiento que ha sido posible gracias al excepcional rendimiento demostrado por tricilíndrico de 765 cc -tanto en su versión de calle, como en la unidad de carreras presente el Mundial de Moto2-, así como por los acuerdos establecidos entre FIM, Dorna WorldSBK Organization y Motor Sports Vision Racing. Con el objetivo de modificar la fórmula de la actual categoría Supersport, con el fin de poner en escena una categoría más competida, con cabida para una gama más amplia de configuraciones de motor, que darán lugar a carreras más emocionantes y un espectáculo mayor. Una categoría que pretende alentar el desarrollo, por parte de las marcas, de modelos al alcance de los usuarios de ‘a pie’; propósito primigenio de los campeonatos con motos derivadas de serie.
Una oportunidad que los chicos de Hinckley han querido aprovechar, para foguearse y acumular experiencia antes de lanzarse a competir en, lo que será, el renovado Campeonato del Mundo de Supersport de 2022. Una tarea para la que Triumph ha decidido servirse de la dilatada experiencia en competición del equipo PTR Dynavolt -con Simon Buckmaster como Team Manager, junto a Kyle Smith junto y Brandon Paasch como alineación- además de Jeremy Appleton (con un largo currículum en multitud de campeonatos: MotoGP, WorldSBK, MXGP, AMA Supercross, F1 y Nascar) desempeñando el rol de Global Racing Manager de Triumph.
Una moto que ha sorprendido a todos tras la celebración de los primeros Test Oficiales del BSB -celebrados en el circuito de Silverstone a pocos días para que dé comienzo la temporada- demostrando su increíble potencial (del que fuimos testigos cuando ‘catamos’ la versión de calle en circuito) al terminar la prueba en un esperanzador segundo puesto. Gracias, también, al saber hacer del experimentado piloto británico (afincado en Alicante) Kyle Smith.
Unos resultados que demuestran el excelente nivel al que se encuentra la naked británica y que representan la viabilidad de un proyecto que podría significar la vuelta a la producción en serie de la Triumph Daytona.