KTM acaba de anunciar el lanzamiento de su moto desnuda más salvaje y que llega en dos versiones gracias a la variante EVO que lleva el concepto más allá gracias a unas suspensiones electrónicas. Pero lo más importante de esta nueva generación es la evolución de un motor preparado para adaptarse a la restrictiva normativa Euro+ que se avecina y que a pesar de ello presenta las siguientes cifras: 1350 cc, 190 CV a 10.000 rpm y 145 Nm de par a 8000 rpm.
Esto ha sido posible gracias a la renovación del propulsor LC8 cuyo diámetro de pistón crece hasta los 110 mm y a un nuevo sistema Cam Shift integrado en la culata que ajusta el tiempo de apertura de las válvulas en función del régimen de giro. Esto proporciona más potencia y par en toda la gama de revoluciones. También hay una nueva caja del filtro de aire y una toma que han permitido rediseñar el depósito de combustible con unas formas más angulosas y una capacidad mayor, ya que aumenta hasta los 17 litros, 1,5 litros más que el modelo anterior. Esto va a proporcionar un pequeño pero importante extra de autonomía ya que por su potencia es una moto en la que el consumo no es precisamente bajo.
La moto transmite aún más radicalidad que el modelo precedente gracias a unas líneas súper afiladas concentradas en las aletas delanteras, algo que se ve acentuado por el elemento clave en la estética, el faro delantero. Ya lo pudimos ver en la nueva KTM 990 Duke y el desconcierto inicial por su originalidad y atrevimiento ha dado paso a ser un rasgo de estos KTM inclasificables que seguro encanta a sus incondicionales. Este faro LED es más ligero que el anterior en 700 gramos y las luces de posición y de circulación diurna están situadas en el perfil del faro, cuya intensidad se ajusta automáticamente en función de las condiciones de luz gracias a un sensor integrado en la instrumentación. Por cierto, el faro permanecerá encendido después de quitar el contacto para aumentar la visibilidad ambiental, una función que KTM denomina "Coming Home". Estéticamente la parte trasera soprende por su limpieza, manteniendo el basculante monobrazo y un colín reducido a la mínima expresión que integra toda la iluminación.
La parte ciclo es del alto nivel que demanda una moto tan potente y deportiva. Como es habitual, las suspensiones son los mejor que tiene WP para carretera, las APEX totalmente regulables. La horquilla WP APEX de cartucho abierto de 48 mm con función dividida cuenta con unos ajustes optimizados mientras que el amortiguador trasero de la misma marca permite ajustar por separado la compresión a alta y baja velocidad, la extensión y la precarga sin necesidad de herramientas.
La versión EVO de la 1290 Super Duke R confía como elemento diferencial clave en la última evolución del sistema WP denominado Tecnología Semi Activa (SAT). Esto permite un ajuste ideal en las condiciones más diversas y en tiempo real gracias a que la SCU (Unidad de Control de la Suspensión) adapta los índices de amortiguación mediante las válvulas magnéticas, leyendo la superficie del asfalto y el estilo de pilotaje para ajustar automáticamente las suspensiones sobre la marcha.
También se ha evolucionado el software de los modos de conducción gracias a unos modos "Performance" y "Track" evolucionados, incluyendo "lap timer" y telemetría, así como un control de freno motor opcional. También se ha mejorado el moto de suspensión "Pro" en la versión EVO.
Sin duda se trata de una gra animadora de ese segmento de mercado tan especial como es el de las naked de muy altas prestaciones. Y ahí irrumpe con una personalidad todavía más marcada y unas prestaciones que van a ser de auténtico infarto, con una imagen todavía más irreverente y compacta que intimida un poco. Ya tenemos ganas de probarla y si tú tienes ganas de tener una pero gratis, solo tienes que visitar KTM.com para registrarse en la newsletter de KTM y así participar en el sorteo de una KTM 1290 Super Duke 2024 que se realizará a finales de año.