El Comité Interministerial de Seguridad Vial del gobierno francés está volcado en una campaña que pretende luchar contra los accidentes con medidas nunca antes adoptadas. Si ya se anunció que se instalarán sistemas de detección de alcoholemia en los coches de quienes hayan dado positivo alguna vez o que se eliminarán los paneles de aviso de radares fijos entre otras medidas, ahora ha llegado el turno a los “motards”. A partir del 1 de enero de 2013 será obligatorio vestir un "dispositivo retroreflectante" de al menos 150 centímetros cuadrados (por ejemplo 10x15cm) situado entre los hombros y la cintura cuando se monte en todas las motos de más de 125cc. Esta norma afectará tanto al conductor como al pasajero, así como a cualquier motorista de paso por Francia so pena de una multa de 68 euros y dos puntos en el carné. La norma especifica que puede tratarse de un dispositivo integrado en la propia prenda principal o bien un accesorio, como por ejemplo un chaleco reflectante.

La medida ya ha sido puesta en tela de juicio por algunas asociaciones francesas de motoristas, que no entienden cómo por un lado se deja fuera de esta medida las motos inferiores a 125 cc. y las bicicletas si se pretende reducir las cifras de lesionados en accidente, y por otro consideran ineficaz la adopción de nuevos elementos reflectantes cuando ya es obligatorio circular con luces encendidas de día y los catadióptricos sólo son útiles por la noche, al reflejar las luces emitidas por por ejemplo los faros de un coche. El problema a su juicio es más la falta de sensibilización entre los conductores de automóviles para prestar mayor atención a las motos que una falta de visibilidad de los vehículos de dos ruedas.

Cuando las barbas de tu vecino…

Y la pregunta ahora es, ¿qué nos tocará en España? Está claro que en toda Europa se está “actualizando” la normativa de seguridad en lo tocante a las motos, lo que por un lado es de agradecer, aunque por otro no se está haciendo prestando atención a las demandas y experiencia de los propios afectados.

Hace unos meses se comunicó la obligatoriedad del ABS (ver reportaje) en todas las motos nuevas de más de 125 cc. y en Bélgica es obligatorio montar con ropa dotada de protecciones homologadas. Se trata de medidas que de una u otra forma tratan de mejorar la seguridad vial.

De lo que no hay parangón es de una normativa de licencias como la que “disfrutamos” en España, que en vez de incidir en la seguridad de quienes quieren ir en moto, establece restricciones para evitar que los ciudadanos puedan elegir con la misma libertad que el resto de europeos rodar sobre dos ruedas. Estamos esperando a los cambios que puedan producirse con la llegada del nuevo gobierno, pero tengamos en cuenta que el Ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, ya ha alabado en público la gestión del todavía Director General de Tráfico, Pere Navarro.