Tras unas cuantas temporadas en el mercado y después de abrir la brecha de los scooters aptos para realizar grandes viajes con total comodidad y prestaciones de moto, el Suzuki Burgman 650 llega a su segunda generación con pocos cambios, los justos para refrescar la imagen y evolucionar la mecánica en los puntos donde el fabricante ha considerado necesario poner más atención.

>Asegura tu mega-scooter con Motofichas desde 75€ ¡Compruébalo!

Así el motor sigue siendo el bicilíndrico de 638cc. alimentado por inyección, pero la transmisión ha sido revisada y puesta al día. Sigue ofreciendo el exclusivo sistema de manejo secuencial desde el manillar con tres programas: manual, automático sport y automático eco, pero la mejora de los componentes, con unos discos de embrague nuevos, permite reducir las fricciones que generan pérdidas internas de rendimiento en un 35%, y en definitiva ofrecen una reducción del consumo en torno a un 15%.

El consumo y las emisiones son dos preocupaciones que se han tenido en cuenta y por ello se ha modificado el sistema de escape, que ahora termina en un nuevo silencioso de sección triangular, y se ha incorporado en la instrumentación un diodo luminoso denominado Eco Drive Indicator que se ilumina si se realiza una conducción eficiente.

>Ficha técnica, equipamiento y galería Suzuki Burgman 650 '13

Ya que hablamos de la instrumentación una pantalla multifunción ofrece lectura de datos como consumos hasta temperatura ambiente y el modo de conducción seleccionado. Frente al conductor hay tres guanteras, una de ellas dotada de toma de corriente, y en la línea del Suzuki Burgman 650 que conocemos bajo el asiento ofrece espacio para dos cascos integrales y algunos pequeños objetos más gracias a sus 50 litros de capacidad. La versión Executive añade al equipamiento básico la calefacción en puños y asientos y respaldo también para el pasajero.

No se anuncian grandes cambios en el bastidor, que mantiene la batalla de 1.595 mm. y el basculante de fundición de aluminio, pero destacan los frenos delanteros ahora con discos semi-flotantes, que por supuesto disponen de ABS de serie. La nueva unidad del sistema antibloqueo ha reducido el peso de la equipada por la primera generación del Burgman 650 en nada menos que un 55%.

Estéticamente el continuismo es evidente, pero entrando en detalles tanto la óptica delantera como la trasera tienen un aspecto más novedoso gracias al diseño multi-reflector y además ahora dispone de luces de marcha diurna LED.