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Todo gracias a nuestros colegas yankees de Asphalt & Rubber, que tienen amigos hasta en el infierno... y a partir de ahora quizás también algún enemigo en Milwoukee. El caso es que ni ellos ni nosotros estábamos sujetos a ningún compromiso, así que ahí van las fotos en primicia de esta iconoclasta Harley-Davidson, el primer modelo eléctrico de la marca y que además hace gala de un estilo diferente al resto de máquinas de tan genuina enseña. Live wire se traduce –además de una canción de AC/DC, por cierto- como una expresión que se aplica a alguien impetuoso, vigoroso, dinámico… algo así. Y este es el bonito nombre elegido por Harley-Davidson para su primera moto eléctrica, elección en la que sin duda “wire” (cable) habrá tenido que ver, que los chicos de marketing están en todo.

Poco más se puede añadir en cuanto a la estética a lo visto ayer en las fotos del set de grabación (>) salvo que la instrumentación es completamente digital, mediante una pantalla de cristal líquido, que nos falta una maneta -la del embrague- gentileza de la transmisión continua, y que el faro principal está compuesto por diodos luminiscentes (LED) de alta potencia y bajo consumo eléctrico. Recapitulando se aprecia que dispone de transmisión final por correa dentada, chasis de función de aluminio, horquilla invertida, frenos por un disco delantero y otro trasero y suspensión trasera por amortiguador central con sistema cantilever. De momento la versión revelada es monoplaza y tiene un moderno estilo cruiser bastante alejado del concepto custom de la marca tal y como lo conocemos.

Características técnicas

Estética atractiva y tecnología punta se dan la mano en la Harley eléctrica, de la que falta por saber el precio y la disponibilidad
Lo que se esconde detrás de su estética -que particularmente me parece muy acertada- es un motor eléctrico trifásico de inducción sin escobillas que genera 74’7 CV (55 Kw) y 52 Nm de par, unas cifras muy interesantes para darle dinamismo a una moto con espíritu rebelde, pero no deportivo, que aún así anuncia que acelera de 0 a 60 millas (96 km/h) en 4 segundos. El equipo de baterías encargado de suministrar potencia eléctrica permite, según los datos “filtrados” de la información oficial de Harley-Davidson, 80 kilómetros de recorrido mixto, cifra algo justa si la comparamos con lo que empiezan a ofrecer los modelos más modernos de la incipiente competencia, que está por encima de los 100 kilómetros.

Sonido único
Entre las características que el fabricante americano no quiere descuidar en la Livewire hay algo con lo que la moto no va mejor, pero que es parte intrínseca de la personalidad de toda Harley-Davidson: el ruido. La moto eléctrica emitirá un sonido particular, que no se parecerá a nada visto hasta ahora, ni entre las motos con motor de explosión, como cabía preveer, ni tampoco entre otros modelos de motos eléctricas. En palabras de Mark-Hans Richer, cicepresidente y jefe de márketing de Harley-Davidson, "El sonido es un ingrediente clave en la emoción. Pensad en los cazas a reacción en un portaviones..." ¡Suena bien!

Será cuestión de poco tiempo tener más datos oficiales sobre la mesa, aunque para conocer el precio primero habrá que esperar que este nuevo modelo, presentado como "proyecto" o lo que viene a ser preserie, madure en el programa de actividades que Harley-Davidson ha programado a lo largo y ancho de Estados Unidos para acercar su innovador nuevo modelo a los clientes y potenciales compradores. Una excelente idea para madurar la moto antes de darla por lista para enviar a los concesionarios de todo el mundo. Intentaremos ser los primeros en contároslo, como siempre.

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