Todos sabemos que esto de las motos ultra deportivas gusta a mucha gente, y aunque los hay de todas las edades, lo cierto es que en su gran parte son jóvenes -la mayoría más adelante cambiarán preferencia en el tipo de moto- con los bolsillos esquilmados por los intereses de sus hipotecas , el precio abusivo de las copas y otros muchos gastos inevitables. Así el panorama, y con la que está cayendo en todo el mundo, lanzar una MV Agusta con toda la magia de su nombre pero a un precio que pueda poner más cerca de los mortales darse el capricho, parece una gran idea.
En Milán la F3 era la estrella del stand MV Agusta. Probablemente será la Supersport con dimensiones más compactas del mercado cuando se ponga a la venta el año que viene. ¡En vivo parece casi una 125!. Estéticamente es tan preciosa como se presupone que debe ser, destacando la solución de las tres pequeñas salidas de escape bajas y laterales en referencia a sus tres cilindros. Una solución que imprime personalidad propia a la F3, al margen de que sin duda nazca bajo el cobijo de su hermana mayor de cuatro cilindros, la F4 (ver ficha tecnica y fotos), tanto por recursos estéticos como por tecnología.
El tricilíndrico es de ingeniería propia, tiene una cilindrada exacta de 675 cc. y resulta extremadamente compacto. De él saldrán 140 caballos en su versión de calle, por encima de todas sus rivales salvo de la Ducati 848 Evo (ver ficha técnica y fotos).
Los colores tradicionales de MV Agusta .-rojo y plata- siguen presentes en el carenado, ligero y afilado, con formas suaves y al mismo tiempo deportivas. El chasis es un entramado de tubos de acero fijado en la parte que lo une al basculante monobrazo con una pieza de aluminio, siguiendo el estilo de la casa, pero con una horquilla invertida de aspecto más sencillo que en su hermana “la cara”, lo mismo que los frenos Brembo, buenos pero no lo más de lo más si bien cuentan con anclaje radial.
Está claro que para poder bajar el precio han tenido que bajar también el listón, aunque sin duda merecerá la pena si a cambio puedes acceder a una MV Agusta de verdad y aun así como mínimo al mismo nivel de componentes que la competencia, o al menos eso cabe esperar.
Su precio será de 11.500 euros (dicho por los responsables de la marca en el Salón de Milán, a groso modo y sin entrar en especificidades de cada mercado) para estar en la misma línea que sus feroces rivales a partir de ahora, nada menos que la armada japonesa a la que se igualaría en precio de hacerse cierta esta tarifa. Parece mentira; la supersport de MV Agusta más barata que la de Ducati... Que se preparen los importadores, no vaya a ser que la demanda les sorprenda.