Ural es una de esas marcas atemporales que gracias a la casi nula evolución de sus productos han logrado subsistir como una rareza que pervive a lo largo de los siglos. De hecho, su completo catálogo durante los últimos años se ha ido refrescando gracias a completas series especiales como esta. Es el regreso de un modelo emblemático que llega con aires renovados.

Su estilazo original se ve reforzado por una puesta en escena bastante meticulosa, con los elementos necesarios para darle ese aire desértico y batallador. Los faros con malla y la presencia de lámparas auxiliares así como las defensas especiales, obran la transformación de elegante sidecar en arma de guerra sin balas ni cañones. La pintura negra tanto en las llantas como en el motor y otras partes, ejerce el contraste perfecto con el kahki.

Como elementos especiales opcioinales dedicados a esta versión esta la rueda de repuesto, la estructura portabultos posterior y la pala que no falte por si las cosas se complican. También tiene una toma USB para los dispositivos tecnológicos más modernos. El parabrisas Givi y los paramamos son otros elementos opcionales destacables. Las ruedas de tacos Heidenau y el pack off-road lo preparan para cualquier aventura.

Mantiene el motor boxer refrigerado por aire de 749 cc y 41 CV, una arquitectura de originaria de BMW que encontró un acomodo perfecto en las creaciones de Ural y continúa empleándose en todos los modelos Ural.

De momento solo se comercializa en EE.UU., cosas del fin de la guerra fría, y el precio es de 17.999 $, que son unos 16.000 € al cambio