No hay ninguna información oficial al respecto pero parece que no hay duda de que va a ser así según la reputada revista inglesa MCN. Ellos lo aseguran basándose en la informaciones recabadas por sus fuentes japonesas, y aseguran que no habrá una sustitución del modelo actual para el mercado europeo que cumpla con la normativa Euro 4. Demasiados costes y pocos beneficios están detrás de esta decisión que solo afectaría de momento a nuestro mercado y no sería inmediato porque hay moratorias establecidas y cupos a partir del 1 de enero de 2017 a las que se pueden acoger las marcas para dar salida a su stock.

Es una verdadera lástima pero el pragmatismo japonés, tanto industrial como comercial van a primar sobre la nostalgia creada en torno a un modelo en franco declive tanto por el cambio de tendencia del mercado que ha hecho sus ventas prácticamente marginales, como por el propio desinterés deportivo de Honda en este segmento de competición. Tan solo Kawasaki, Suzuki y Triumph parecen tener interés en estas cilindradas intermedias, antaño referencia del mercado. Porque el futuro de la YZF-R6 es también bastante incierto y podría seguir el mismo camino de la CBR600RR.

El problema es que el esfuerzo de desarrollo de una nueva moto supersport es prácticamente igual de costoso que el de una superbike y la nueva Honda CBR1000RR va a llegar en 2017. Y además el público no está dispuesto a pagar una cifra desorbitada por una 600, algo más justificable en el caso de una 1.000 cc, por eso el margen de beneficio es tan pequeño que no merece la pena el gran esfuerzo que supondría preparar una Honda CBR600RR Euro 4.

›Datos técnicos y precio Honda CBR600RR

Por supuesto parece que no ha sido una decisión nada fácil de tomar en Honda, de hecho parecía algo impensable hasta hace poco tiempo. Pero el propio sistema de financiación de nuevos modelos de Honda también ha jugado un papel clave en la decisión: las distintas filiales en la áreas regionales mundiales hacen una aportación para los nuevos modelos y Honda Europa no ha tenido que hace muchos cálculos para tener claro que la inversión en una nueva Honda CBR600RR Euro 4 iba a ser difícilmente recuperada. Y por la misma razón en sentido opuesto la gigantesca y todopoderosa filial americana tampoco habrá visto razón para aportar dinero al desarrollo de un modelo que ellos no necesitan porque no tienen que lidiar con la Euro4.

Por tanto el escenario se ha puesto muy complicado para poder dar continuidad a este modelo tan tremendamente popular a finales de los años 90' y comienzos del nuevo siglo. De hecho ha sido quizás el modelo más vendido de su categoría gracias su consabido fácil manejo, polivalencia, fiabilidad, bajo mantenimiento y por supuesto pedigrí deportivo.

Pero los usuarios tienen hoy día otros intereses, ya no quieren esa moto tan específica para circuito sino que buscan la deportividad de otros modos, principalmente en formato naked, mucho más polivalente y adaptado a la vida real.  Se ha perdido el interés en las motos hiper deportivas tal y como las hemos conocido, y parece que solo las 1.000 tienen un futuro garantizado a pesar de que sus ventas sean más bien tímidas pero no así sus márgenes, como hemos comentado antes. Ampliaremos esta triste noticia cuando llegue la confirmación oficial de Honda.