Primero fue la MT-10, una de las naked más excitantes del panorama actual, y después llegó una versión todavía más rácing, con mejores suspensiones: la MT-10 SP. Pero en Yamaha parecen tener claro que son muchos los usuarios que le dan distintos a la moto y que requieren de ciertas comodidades, especialmente si se desea hacer rutas de más de un día de duración. Para éstos va dirigida la Yamaha MT-10 Tourer, equipada con una serie de accesorios originales imprescindibles para salir a la carretera.

Dentro de estos accesorios, los que más llaman la atención son las maletas laterales flexibles, con cerraduras antirrobo, y la pantalla. También se añaden unos protectores para las manos, un nuevo asiento más confortable, un navegador TomTom Rider 410 y su soporte. El precio por separado de todos estos componentes superan los 1.600 euros, con lo que el ahorro al adquirir la versión Tourer es de unos 400 euros (16.999 euros por los 15.799 euros de la versión estándar). Pay que añadir además que Yamaha regala un escape Akrapovic, valorado en 800 euros, por la adquisición de cualquiera de las dos versiones.

El resto de la moto ya lo conocemos. Es la naked que deriva directamente de la YZF-R1, es decir, monta un motor "crossplane" de 998cc con cuatro cilindros en línea aunque suavizado para quedarse en una potencia de 160 CV. Dispone de acelerador electrónico con sistema Yamaha D-Mode que permite elegir tres modos de funcionamiento. El control de tracción, desconectable, también permite cuenta con tres niveles de intervención. No falta el embrague antirrebote, mientras que el "quickshifther" es opcional.