Fabricadas en Italia, son las últimas incorporaciones a un catálogo cada vez más atractivo. Lambretta cobra fuerza apoyada en su mítico nombre y en unos scooters que con carácter vintage, han tomado su propio camino estético, definiendo un estilo propio. Y esto es algo muy de agradecer en un mercado donde nadie respeta lo genuino y todas las marcas que fabrican un scooter retro, lo hacen a costa de las líneas Vespa.

Pero Lambretta, tal y como hizo hace más de cuatro décadas, plantea un scooter de líneas muy personales de la mano de Alessandro Tartarini que ha sido el encargado de crear su nuevo estilo.

La ampliación de la gama se producirá esta primavera con el lanzamiento de la Lambretta LJ 50, impulsada por un motor de 4 tiempos, tres válvulas y refrigeración líquida. Pero no todo va a ser tan soso y ecológico, también habrá disponible otra versión de dos tiempos, la LT, aunque refrigerada por aire.

Los colores para estas pequeñas Lambretta son el azul cobalto y el rojo, diría que pasión, por ponerle también apellido.