Cualquiera de los modelos de Indian es lo suficientemente llamativo para conseguir centrar las miradas, pero con la nueva Roadmaster Classic será más fácil todavía. A su impresionante tamaño se unen unos acabados en cuero en su conjunto de maletas que destacan por encima del resto del conjunto. El uso del cuero no es una novedad ni mucho menos, pero sí que no es tan habitual verlo en colores claros, con flecos y en combinación con unos colores tan atrevidos a la par que clásicos. El asiento también se ha forrado de cuero con la misma tonalidad, consiguiéndose una apariencia única.

La parte delantera resulta igualmente impactante, con un faro delantero central y con otras dos antinieblas laterales, todas ellas con tecnología LED, al igual que la trasera. El parabrisas se regula electrónicamente en altura, un detalle pensando en el confort de los que van subidos en ella, y a lo que se suma la calefacción en el asiento biplaza y en los puños.

Otra gran novedad que aparece en la Roadmaster Classic es el montaje del sistema Road Command, que incluye el sistema de audio y de navegación, así como toda la información de usuario. Este sistema se gestiona a través de una pantalla táctil de gran tamaño (7 pulgadas) y que se maneja con dos dedos incluso con los guantes puestos.

El motor de la Roadmaster Classic es el conocido Thunder Stroke 111, diseñado para ofrecer unas cifras de par a muy bajo régimen. Su puesta en marcha se realiza sin llave gracias a una tarjeta de aproximación. La vida a bordo de la última novedad de Indian se consigue, entro otros detalles, a un asiento biplaza de gran tamaño, las estriberas regulables para el pasajero y al control de crucero. 

Es una moto para viajar, a la que le gusta coger carretera y no soltarla nunca. Espacio para el equipaje sobra gracias a sus más de 120 litros de capacidad repartidos entre su maletero, las maletas laterales y los huecos del carenado. El entretenimiento llega a cargo del equipo de audio de 100W.