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Motos Bordoy, el importador de SYM, ha apostado fuerte por este interesante maxiscooter que con esta nueva versión mejora sus ya de por sí buenas cualidades en la frenada, y por eso fuimos invitados a conocer de primera mano su rendimiento en un escenario sinuoso donde las frenadas cobran un mayor protagonismo.

Y es que a su logrado esquema combinado que pudimos probar a fondo hace no mucho tiempo en la versión ahora stándar, suma el sistema antibloqueo que monta el SYM Maxsym 400 ABS para incrementar la seguridad activa tanto en la versión de 300 cc que hemos pilotado como en la 125 cc que no estaba en la presentación pero también gozará de este importante sistema más adelante.

Compacto y preciso

Bosch ha sido la compañía encargada de desarrollar el ABS 9ME específico para motos y scooters, y gracias al buen rendimiento obtenido en el Maxsym, la firma taiwanesa ha decidido implementarlo en el Joymax 300i. Es una unidad muy compacta que apenas añade peso al conjunto gracias a sus 700 gramos de peso. Un nuevo sensor de presión adicional se encarga de optimizar su funcionamiento incluso con gravilla o asfalto sucio, evidenciando el gran desarrollo de estos sistemas que cada vez son más efectivos y económicos.

En la práctica pudimos comprobar su efectividad en ambas ruedas con un comportamiento lógicamente diferente cuando accionamos la maneta izquierda que activa ambos discos repartiendo la fuerza de frenada, y la derecha que únicamente actúa sobre el disco delantero.

Es curioso cómo el ABS entra junto al sistema combinado permitiendo pequeños bloqueos de la rueda trasera que podemos incluso oír, mientras alarga la distancia de frenado para evitar el bloqueo de la rueda delantera. Tratándose de un maxiscooter que ya frenaba de forma ejemplar, el sistema antibloqueo asegura todavía más la frenada pero dándonos la sensación de necesitar más espacio para detener el vehículo en caso de emergencia.
En cambio, nos ha parecido que le aporta más al freno delantero que no tenía mucho tacto en la versión sin ABS y esto hacía recomendable vivir siempre con la maneta izquierda lista para cualquier imprevisto. Ahora, no es que el tacto haya mejorado pero sí ha desaparecido la sensación de poder bloquear por falta de sensibilidad y eso hace que confiemos en él mucho más.

La conclusión es de que se trata de un sistema que entra en acción cuando es necesario, sin ganas de protagonismo, sobre todo en la maneta derecha. Es normal que entre mucho antes en la izquierda ya que también actúa sobre la rueda trasera con tendencia a bloquear con facilidad por naturaleza.

El incremento de precio respecto a la versión normal es de 400 €, lo que le deja en una buena situación en comparación con rivales de la entidad del Kymco Super Dink 300 ABS, su competidor más directo. Por lo tanto se quedaría en 4.499 € con la promoción de seguro gratis, toda una tentación teniendo en cuenta el buen rendimiento de su motor, la cómoda ergonomía, su gran hueco bajo el asiento y una buena dotación general que remata con un diseño muy elaborado.

El 125 con ABS llegará tras el verano pero no está confirmado su precio que previsiblemente tendrá un incremento similar para quedarse en unos 3.499 € para la versión con carburador y 3.799 € para la de inyección.

EQUIPAMIENTO PILOTO:

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