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Nada menos que 20 patentes están detrás de los innumerables pequeños cambios que se han sucedido en el SH125i, todos para que el usuario final siga contando con un modelo a la altura de una difícil competencia. Desde 1.984, año en el que la familia Scoopy nació con su pequeño SH50, han ido teniendo lugar las diferentes etapas evolutivas de un rueda alta urbano cuyas señas de identidad son dinamismo, agilidad y comodidad. Motor de altas prestaciones y 4T en 2001, inyección electrónica en 2005, mejora de componentes… ¿Qué más podía hacer Honda para seguir mejorando este popular modelo? Pues lo ha renovado por completo, pero te adelanto que lo destacable para 2013 es que bajo el asiento cabe por fin un casco integral, y la inclusión del sistema ABS.
El modelo 2013 se fabrica en las instalaciones de Honda en Atessa (Italia), y los esfuerzos de renovación se centran en reducir el consumo, mejorar el rendimiento y mantener alto su nivel de equipamiento. Incorpora el novedoso motor conocido como eSP (enchanced Smart Power) construido con tecnología de baja fricción en el que se ha trabajado para que dé lo mejor de sí en el rango de revoluciones que más se utilizan, o sea, bajo y medio régimen. A pesar de que pierde 2 CV respecto al anterior modelo y se aleja aún más del límite de 15 CV impuesto por la convalidación del carné para modelos de 125 cc, sólo se nota algo más perezoso en las salidas ya que su desarrollo en estirada es ejemplar teniendo en cuenta potencias y consumos. En este aspecto se hace más notoria la tecnología de baja fricción empleada, consiguiendo menores pérdidas de potencia desde el motor hasta la rueda trasera y compensando por consiguiente la disminución de potencia en el motor 2013. La velocidad máxima que podrás ver en el marcador es 120 km/h, insuperable por el límite impuesto por el corte de encendido en beneficio de la durabilidad del propulsor (esto pasa bastante a menudo, lo que demuestra su buen hacer no siendo difícil aprovechar todo el rango de revoluciones).
Ajuste para el mínimo consumo
Hace uso de un sistema denominado Idle Stop o paro al ralentí, que mediante la activación por medio de un botón situado en la piña derecha fuerza la detención del motor después de unos segundos a ralentí, y aunque en teoría se busca una reducción en el consumo, apuesto a que los 2,11 litros a los 100 km anunciados por Honda (casi 1 litro menos que lo reflejado en nuestras mediciones) tienen más que ver con otros aspectos como la reducción del peso y la mejora de la combustión. Aún así el Idle Stop no supone un obstáculo a la hora de salir de un semáforo partiendo del motor “apagado”; el arranque es inmediato, preciso y suave gracias a un sistema de retroceso que gira el cigüeñal a su posición justo antes de la admisión y a un mecanismo de descompresión que evita la resistencia al giro debida a la compresión.
El chasis ha sido objeto de diversidad de cambios. Fabricado en tubo de acero, se consigue una reducción de peso respecto al del modelo anterior mediante un diseño más sencillo que no resta rigidez. Su rediseño permite ampliar la capacidad del hueco bajo el asiento hasta el punto de ofrecer espacio para cualquier casco integral; esto es un punto que el usuario valorará muy positivamente sin lugar a dudas, sobre todo si tenemos en cuenta que se trata de un rueda alta y que en algún que otro modelo de la competencia que anuncia la capacidad para un integral suele ser imposible hacerlo sin forzar el cierre.
Algo que se ha tenido bastante en cuenta a la hora de componer el nuevo Scoopy ha sido el peso y la centralización de masas; el nuevo chasis es 1 kg más ligero, y el radiador se integra en el mismo motor (otro kg de peso respecto al de la anterior versión situado en el escudo frontal).
Elegante pero deportivo
En conducción a alta velocidad (100-120 km/h de marcador) el SH125i es estable y seguro; no duda a la hora de enfrentarse a una curva o entrar a una rotonda de manera brusca. Callejeando y en su tránsito por la ciudad se muestra ágil y ligero, y las 16” de sus ruedas siguen aportando la estabilidad a la que ya nos tiene acostumbrados. Quizá uno de los puntos débiles es la excesiva dureza de las suspensiones, algo que te obligará a andar más pendiente de los pequeños baches y no sólo de alcantarillas y socavones, si buscas una conducción cómoda; como siempre, la otra cara de esta moneda suele ser y de hecho es que el Scoopy no se “menea” y la estabilidad en curva se ve difícilmente comprometida. Aún así el amortiguador trasero permite modificar la precarga con un rango de ajuste mayor que en el modelo precedente.
>Ficha técnica, galería y equipamiento Honda SH125i 2013
En modelo 2013 abandona el sistema de frenada combinada CBS pero da la opción de incorporar un ligerísimo ABS, sistema con el que contaba nuestra unidad de pruebas y que funciona sin pega alguna. Con un piloto de 85 kg de peso el Scoopy se detiene con total seguridad si nos empleamos a fondo con los frenos, activándose justo en el momento en el que la rueda trasera quiere empezar a bloquearse.
La posición de conducción se ve beneficiada, al igual que en anteriores versiones, por una plataforma plana que permite buen movilidad de las piernas, además de permitir el transporte de objetos que pueden ir asegurados al útil gancho porta bolsas. En cuanto a la capacidad de carga, el SH125i ofrece además algo de hueco en la guantera situada en la parte izquierda del contraescudo y portaequipajes trasero preparado para la instalación de un top box opcional. El acompañante cuenta con un espacio bastante amplio en el asiento y unas estriberas abatibles de generosas dimensiones que ofrecen un excelente apoyo, y la única pega que encontrará vendrá ligada a la dureza de la suspensión trasera.
La instrumentación sigue ofreciendo la misma información que en el modelo anterior pero con un toque más moderno; cuenta con velocímetro e indicador de gasolina y temperatura analógicos, además de los pertinentes testigos luminosos, reloj horario y cuentakilómetros con contador total y dos parciales. A pesar de que el SH125 de 2013 sitúa al conductor en una posición un poco más avanzada y por tanto es necesario desviar un poco más la cabeza para visualizar el panel de instrumentos, las dimensiones y disposición de los relojes ofrecen una lectura fácil y suficiente nivel de información.
En positivo
| En negativo
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Un comentario aparte se merece el posicionamiento del conmutador de intermitentes, que situándose en una posición objetivamente más fácil para la mano y dejando un espacio libre en el que se coloca el botón del claxon, hace sin embargo que uno vaya pegando bocinazos en vez de activar los intermitentes hasta que te acostumbras. Algo que también deberás hacer con el pulsador de apertura del asiento; antes de que creas que el sistema se ha estropeado y pienses que la única opción para recuperar tus objetos personales es forzar el asiento, debes saber que sólo funciona si la llave de contacto está en una determinada posición.
Teniendo en cuenta los colores disponibles (negro nightstar perlado, blanco cool perlado, plata moondust metalizado y rojo sienna perlado) y la cantidad de mejoras introducidas, si eres de los que decide renovar su Scoopy por una unidad de 2013 nadie podrá decir que es por capricho. A las ventajas de renovar modelo sumarás el dejar de llevar el casco encima cada vez que aparques y la reducción del consumo, mientras sigues disfrutando las bondades de un rueda alta.