> Asegura tu moto con nosotros al mejor precio ¡Compruébalo!

Es la guinda a una renovada familia Monster que ahora cuenta sólo con dos componentes ya que las versiones 696, 796 y 1100 EVO son ya historia y han sido sustituidas por las nuevas Monster 1200 y Monster 821.

Este relevo generacional ha supuesto un verdadero salto adelante para Ducati que apuesta por conservar las señas de identidad que tanta popularidad le han dado a la Monster, redefiniendo su concepto hacia un horizonte más versátil, marcado por la electrónica y una ergonomía deportiva pero amable con sus ocupantes.

Pasión, razón y tecnología
Por eso Ducati ha hecho una moto orientada a un público generalista pero sin dejar fuera ni a los poco experimentados ni a los mucho, ya que ambos encontrarán interesantes argumentos para tenerla en su garaje.

La versión disponible para el carné A-2 evidencia el interés de Ducati por esa savia nueva que llega a las naked de media cilindrada. Ellos encontrarán una moto “amigable” desde el primer momento, con una posición de conducción nada forzada, bastante cómoda y una movilidad muy natural e intuitiva. Y si esto no es suficiente el motor se puede poner en modo “Urban” y los 112 CV se quedan en unos dóciles 75 CV con los que también se puede disfrutar sin que la potencia intimide. El Ducati Safety Pack con ABS (desconectable), tres modos de conducción y control de tracción aporta una versatilidad y seguridad que la clientela más inexperta agradecerá.

Y los experimentados encontrarán una moto con la suficiente potencia y calidad en la parte ciclo como para disfrutar de una conducción excitante, siempre en modo “Sport”, por supuesto. Los 112 CV de su Testastretta 11º se muestran en toda su dimensión, con una respuesta rápida y enérgica del acelerador electrónico y una parte ciclo que propone diversión en cada curva.

El único “pero” es que ya no hay una moto de acceso a la gama que con un precio popular pues tendrás que ahorrar como mínimo 10.490 € para ir sentado en una Monster. Esto es debido a que la calidad general de la moto es bastante buena con componentes de primer nivel, un motor de última generación y una dotación electrónica completa y sofisticada.

Para conocerla en primera persona Ducati Ibérica nos citó en sus instalaciones de Valencia con una ruta preparada en la que ciudad, autovía y montaña nos darían una idea muy detallada de lo que ofrece la Monster 821.

Dinamismo polivalente
Comenzamos en ciudad con el mapa “Urban” de 75 CV para comprobar la diferencia con los otros dos, el “Touring” y el “Sport” que cuentan con los mismo ,112 CV pero la entrega de potencia varía para mostrarse algo más progresiva en el modo turístico. Lo bueno es que se pueden cambiar en marcha y de forma muy sencilla con un pulsador en la piña izquierda.

Con la potencia “capada” voluntariamente empezamos a descubrir en ciudad lo bien que se movía entre coches y a baja velocidad. El motor ayuda con una respuesta al acelerador precisa y suave, es el modo ideal para días de lluvia y para conductores con cierta experiencia pero en fase de aprendizaje con motos grandes. La ligereza también ayuda a este público pues con sólo 179,5 kg anunciados en seco, se maneja bien tanto en marcha como en parado.

Datos técnicos, vídeo, fotos y equipamiento Ducati Monster 821 >

Lógicamente estábamos ya con ganas de conocerla de verdad y en cuanto nos encontramos en la autovía cambiamos al modo “Sport” y la respuesta fue radicalmente diferente: la aceleración se volvió instantánea y vigorosa, tal y como te esperas de un bicilíndrico de Ducati. Tras unos cuantos kilómetros ya nos habíamos percatado de la comodidad en marcha gracias a unas suspensiones de calidad que absorben bien las irregularidades y que como descubriríamos poco más tarde, ofrecen un rendimiento en conducción deportiva muy equilibrado con la potencia del motor.

El confortable asiento con un mullido de alta densidad (variable en altura de 785-810 mm) así como la posición de las estriberas y el manillar también influyen en este confort que disfrutamos desde el primer al último kilómetro. Antes de abandonar la autovía ya nos habíamos dado cuenta de que los retrovisores encajaban muy bien en el llamativo diseño general pero no estaban resueltos como nos hubiese gustado, ofreciendo una nítida panorámica trasera; las vibraciones distorsionaban la imagen y nuestros brazos invadían irremediablemente algo del espacio de visión.

Y en estos pensamientos andaba cuando salimos de la autovía para ir hacia el interior valenciano por carreteras secundarias, unas carreteras que cada vez se enroscaban más sobre sí mismas hasta que llegamos a un valle donde apenas había rectas. Era una sucesión constante de curvas perfecta para explorar los límites tanto del motor como de la parte ciclo. Precisión y ligereza son dos de las cualidades más evidentes de esta Ducati 821 que te permite ir rápido sin exigirte más que la concentración necesaria para ir siempre por la línea buena, algo sencillo con una moto tan intuitiva.
Es una moto que te permite ir rápido sin exigirte grandes dotes de pilotaje por su forma de moverse tan natural e intuitiva

Los constantes apoyos fuertes no mostraron flaqueza de la horquilla y eso a pesar de la potente pinza monobloque (Brembo) delantera que mordía el disco con mucha fuerza en las retenciones más apuradas. Ella se movía de una curva a otra con gran facilidad y las transiciones eran fulgurantes aprovechando el buen rendimiento del motor en bajos y medios. El embrague antirrebote se mostró preciso e incluso útil en alguna reducción al límite.

Pero echamos de menos un indicador en marcha engranada en una instrumentación bastante completa donde tampoco hay nivel de gasolina, ni autonomía o algo para poder controlar la gasolina que nos queda antes de que se presente de golpe la reserva. Por cierto, Ducati recupera para la Monster su depósito de combustible (17,5 l) metálico de que además favorece al diseño general gracias a sus musculosas formas. Esta cifra la dota de una buena autonomía pues no se mostró especialmente tragona a pesar del fuerte ritmo casi constante que arrojó un consumo medio de 6 l/100 km.

La sensación al volver de camino a Valencia era de habernos quedado con ganas de más curvas y más disfrute con esta polivalente Monster 821 pero se pasaba el arroz de la paella que pondría colofón a la excursión y nos pusimos rumbo a la costa para dar buena cuenta de ella.

Durante la comida charlamos sobre su precio: 10.490 € cuesta la versión totalmente negra mate y 10.990 € la roja y la blanca. Estas dos últimas son más caras porque incluyen una tapa del colín pintada a juego.

Es cierto que Ducati eleva el listón considerablemente pero no sólo en el precio sino también en la calidad y las prestaciones frente a sus predecesoras. Recordemos que esta Monster está hecha a imagen y semejanza de la sofisticada 1200 pero luce un basculante convencional de doble brazo en vez de monobrazo, así como una salida escape también doble aunque más discreta de tamaño, quizás demasiado. Lo que no cambia es el concepto de motor unido directamente al chasis heredado de la Panigale, algo acertado y definitivo en las buenas cualidades de esta nueva Monster 821 que tan buen sabor de boca nos ha dejado en esta primera toma de contacto.

Y para los que buscan en Ducati algo más barato no se deben preocupar, se avecina una solución: la nueva Scrambler que llegara en febrero de 2015 será una oportunidad a los que quieren una máquina desmodrómica más sencilla y por lo tanto económica. Pero eso es "harina de otro costal"...