Fotos: Carolina F.Varela
Con la buena base de su hermana, la YZF-R3, Yamaha ha creado una moto todavía más cómoda y sencilla de conducir, algo difícil porque la versión deportiva ya destacaba por su amistosa relación con el piloto para el día a día, a pesar del carenado integral y los semi manillares.
La MT-03 destaca por su estilo streetfighter concentrado, ya que se presenta ante nosotros como una moto compacta y rebosante de estilo callejero. Y efectivamente desde el primer momento se destapa como una moto tremendamente apropiada para el entorno urbano: pequeña, rápida y de reacciones muy ágiles.
Una naked cómoda y polivalente
Otra de sus características es la comodidad, gracias a una postura natural para los brazos y las piernas. Las extremidades inferiores no van muy forzadas en cuanto a flexión pero sí un poco retrasadas para poder adoptar una posición deportiva cuando lo deseemos. Tampoco cargamos mucho las muñecas debido al manillar alto, contribuyendo a la sensación general de confort.
El asiento es amplio, dejando moverse a un piloto menudo como yo sin problemas, y ofreciendo a la vez una buena habitabilidad a usuarios de más envergadura. Es duro y eso se nota cuando llevamos un par de horas sobre la MT-03, un lapso de tiempo mucho más largo del que habitualmente se emplea para cualquier desplazamiento urbano, por lo que no representa mayor problema: es algo de lo que nos daremos cuenta si hacemos de vez en cuando excursiones en busca de bonitos lugares y buenas curvas, algo para lo que la naked de Yamaha está perfectamente preparada.
Obviamente, no es una moto naked rutera por concepto pero su carácter urbano no es un condicionante definitivo ya que contamos con un elástico motor capaz de impulsarla por encima de los 170 km/h de marcador, una cifra sobrada para abordar cualquier desplazamiento por carretera o autovía.
Precisamente al salir del corazón de la ciudad, se agradece mucho la cúpula, pequeña pero muy efectiva a la hora de derivar el incómodo aire que entra de forma frontal en una moto sin carenado. Pero es un accesorio opcional con un precio de 82,84 €.
Yamaha MT-03: potencia y dinamismo
Aparte de la acertada ergonomía, al menos para un tipo como yo que mide 1,66 m, la MT-03 destaca por el buen rendimiento de su motor. Se trata de una mecánica de dos cilindros paralelos con 42 CV que se adapta perfectamente a la filosofía de la moto al ser suave en el tacto pero enérgica en la respuesta.
El tacto preciso al acelerar, y el rodar sin apenas ruido y vibraciones, hace que las sensaciones sean muy agradables. De hecho, suena tan poco que al girar muy alto de revoluciones no emite un sonido realmente bonito. Pero eso pasa a un segundo plano cuando cuentas con un motor tan alegre en su rendimiento.
La facilidad para rodar a bajas vueltas sin traquetear no es impedimento para ver cómo sube de vueltas con rapidez en cuanto enroscamos a fondo el acelerador aprovechando también el buen tacto del cambio. Y es a partir de las 8.000 rpm cuando el bicilíndrico da lo mejor de sí, con una patada notable para ser un motor tan pequeño, exhibiendo su faceta más deportiva.
Además, el consumo medio durante la prueba fue de 4,5 l/100 a ritmo muy alegre de forma constante, por lo que en una conducción más tranquila y sosegada, la cifra estaría en torno a los 4 l/100 km.
Una naked sencillamente guerrera
Pero me resultó complicado ir a un ritmo moderado porque es una moto que pide guerra a todas horas, no solo porque el motor es una constante explosión de júbilo sino porque la parte ciclo y la ergonomía acompañan a la perfección.
La sensación de control gracias al manillar alto es total y los movimientos son tan fluidos que los 163 kg parecen muchos menos. Los giros y los cambios de dirección se hacen con una facilidad absoluta, por eso resulta tan apropiada para pilotos principiantes que apreciarán mucho la sensación de ligereza y su facilidad de conducción.
> Datos técnicos y vídeo Yamaha MT-03 2016
Esta buena predisposición para ratonear a placer en el tráfico no tiene ninguna contrapartida cuando estamos circulando por terreno abierto, donde la agilidad se vuelve estabilidad. Incluso a los ritmos más fuertes que permite circular no muestra atisbo de aligerar el tren delantero en ningún momento. Ambas suspensiones cuenta con un tarado muy bien equilibrado entre la dureza necesaria para un moto con talante deportivo y el indispensable grado de confort necesario en un intensivo uso urbano.
Y en curvas parece, sin ningún sentido peyorativo, una bicicleta por lo fácil que es guiarla por la trazada elegida. Es una colaboradora nata a las órdenes que le enviamos dese el manillar, evidenciando que sus neutras geometrías de dirección son muy acertadas.
Para rematar el cóctel dinámico que propone, los frenos resultan una parte esencial y la MT-03 vuelve a demostrar lo bien concebida que está con su ABS de serie. Los frenos ya cuentan de por sí con buen mordiente y un tacto dosificable pero cuando de verdad se necesita el sistema antibloqueo actúa de forma muy efectiva, proporcionando mucha seguridad en este importante aspecto.
Yamaha MT-03: precio y equipamiento
La calidad visual, con un diseño muy personal y llamativo, se corresponde con un buen tacto de los materiales y los ajustes. También tiene detalles como el logo MT en el depósito, la quilla, las tomas de aire frontales, la iluminación LED en el faro posterior y hilera en la parte superior del faro, por nombrar lo más llamativo.
También resulta un buen argumento la instrumentación totalmente analógica-digital con interesante información como la marcha engranada, el testigo de sobrerrégimen o la hora. Además, informa de consumo medio de combustible, la velocidad media o los kilómetros recorridos con la reserva.
Poco más se le puede pedir a una moto que cuesta 4.999 € y está en perfecta situación respecto a la competencia más directa como la BMW G 310 R, la KTM 390 Duke, la Kawasaki Z300, frente a las que las diferencias de tarifa son mínimas. Por encima si sitúa en precio y potencia la Honda CB500F, y por debaj,o una moto tan interesante como la Benelli BN302, todas formidables rivales de nuestra protagonista, la MT-03 que cuenta con todo lo necesario para ser un excelente alternativa a cualquiera.
