Sumario

La segunda generación del Like 125 ha tardado en llegar pero lo ha hecho estrenando un motor de refrigeración por aire que va a marcar el camino a seguir por Kymco. Se trata de una avanzada mecánica que a día de hoy ya está lista para superar la normativa Euro5 que entrará en vigor en el año 2020.

Por eso este pequeño modelo es capital para Kymco, ya que ha sido el elegido para implementar una serie de nuevas soluciones de presente con mucho futuro. El mérito principal del nuevo motor es ofrecer más rendimiento a la vez que reduce drásticamente las emisiones contaminantes del cualquier tipo.

Todo es nuevo en el Like 125, salvo su estilo retro que se ha recreado proyectando una mayor sensación de calidad con numerosos detalles de orden práctico y estético que lo hacen muy completo.  

Corazón ecológico y competente

Para probarlo acudimos hasta la monumental ciudad de Segovia, donde el estilo urbano y delicado del Like encaja a la perfección en una sobria arquitectura cargada de historia, y en un pavimento adoquinado donde poner a prueba sus cualidades como vehículo de uso cotidiano.

Lo primero que llama la atención al arrancar es la suavidad y el tono discreto de la mecánica. También lo rápido que engancha con el variador y nos impulsa con sorprendente alegría los primeros metros.

Se notan sus 11,56 CV, 2 CV más que el Kymco Miler y 2,5 CV más que el Agility City, también equipados con una mecánica refrigerada por aire. Para lograr que manteniendo las emisiones por debajo del límite actual,el motor ofrezca mejor rendimiento, se han usado piezas más ligeras, como por ejemplo en la culata. También se ha dispuesto un nuevo árbol de levas y un soporte de fijación para el rodamiento del cigüeñal que contribuyen a ese carácter poco contaminante pero efectivo en cuanto a sensaciones y prestaciones.

El consumo medio que anuncia Kymco es de solo 2,8 l./100 km, una cifra francamente baja que hace cundir un depósito de tan solo 6,5 litros.

Su desarrollo lo hace ideal para el entorno urbano, donde la aceleración frente al tráfico es suficiente para rodar con tranquilidad a su ritmo e incluso por encima. Estoy hablando desde la perspectiva que me dan mis 60 kg de peso que lastran poco su progresiva pero decidida aceleración.  

La ciudad es suya

Las calles de Segovia están en su mayoría adoquinadas por toda la parte monumental que estuvimos recorriendo durante toda la jornada; una prueba exigente tanto para las suspensiones como para los frenos e incluso los neumáticos.

Kymco ha montado unos componentes sencillos, adoptados a la personalidad del scooter, y eficaces en cuanto al rendimiento que muestran en la práctica.

Para los frenos, el Like 125 recurre a un sistema combinado con dos discos que se accionan desde la maneta izquierda, repartiendo la frenada un 65% al trasero y la restante fuerza al delantero. De esta forma, se puede tirar sin miedo a fondo de la maneta para detener el scooter con bastante rapidez y, por lo tanto, seguridad. La maneta derecha sirve de ayuda pero, sobre todo si se tiene poca experiencia, lo más recomendable es usar por norma el sistema combinado.

La suspensión tuvo un trabajo complicado en el irregular firme por donde transitó la prueba, pero confirmó que el tarado elegido por Kymco es bastante acertado, tanto delante como detrás a pesar de tener una llanta pequeña de 12 pulgadas que no ayuda a mitigar las sacudidas del terreno.

Pero lo cierto es que se mostró ágil, asi como fácil de llevar y manejar, casi un juguete. Las suspensiones no mostraron una excesiva tendencia al rebote a pesar del castigo continuado del empedrado. Esto ya es prueba suficiente para poder afirmar que en unas condiciones de asfalto normal brindará un confort de marcha muy de agradecer.

Además, los dos muelles de paso variable montados detrás ofrecen cinco posiciones de precarga, por lo pueden matizar su comportamiento en función del firme y la carga habitual. Un buen detalle para un scooter de coste tan ajustado.  

Estilo y detalles

La posición de conducción resulta cómoda, independientemente de la talla del piloto,ya que se disfruta de una plataforma casi plana y un amplio asiento cuya tonalidad varía en función del color elegido, dándole un toque de gracia añadido a su cuidado diseño.

La sensación en cuanto al tacto de los materiales es la esperada, aparente y a la vez suficiente para cumplir una función no meramente estética, ya que se perciben además buenos acabados generales.

A su evidente herencia de los scooters retro suma elementos de total actualidad, como la iluminación LED que Kymco ha usado en todas partes; es el segundo vehículo con tecnología totalmente LED de su gama ya que el primero fue el AK550.

El pasajero dispone de unas discretas y prácticas estriberas extraíbles que fijan los pies, la mejor fórmula a mi juicio, mientras que para las manos tiene una asidera cromada de buenas dimensiones que rodea la parte trasera del asiento. El acabado cromado también lo encontramos en otras piezas como por ejemplo los espejos o las llantas, contribuyendo a esa buscada sensación de distinción y clasicismo.

La ligereza del Like 125 (128 kg) hace que sea recomendable estacionarlo siempre procurando armar el caballete central. Los que sean amigos de usar la pata de cabra – nunca lo he sido en un scooter – deberán tener cuidado porque tiene un sistema retráctil de muelle que se recoge solo, algo que puede hacer que se nos caiga en un despiste.

La instrumentación ofrece una imagen agradable en esa combinación que se ha hecho analógico-digital siguiendo el espíritu de sencillez y sofisticación a la vez que define al Like 125. Con avisador de revisiones, indicador de baja temperatura, temperatura ambiente, nivel de gasolina, indicador de USB y reloj, el nuevo Like tiene todas las referencias que se le pueden pedir a un scooter de su categoría.

El hueco bajo el asiento es sorprendentemente espacioso ya que nos habían informado previamente de que no cabe un casco integral. Y es que es bastante largo y con capacidad pero el refuerzo interior en la parte central del asiento impide que puede cerrarse si hay un casco integral. No hay manera de poder hacerlo y Kymco no tiene previsto suministrar uno para incrementar su capacidad de carga, ya que interferiría en el diseño tan limpio que se ha planteado en la parte trasera.

No obstante, es un hueco que tiene bastante capacidad a la hora de guardar objetos cotidianos, por lo que tiene un importante papel en su sentido práctico. En este aspecto, también hay que destacar el gancho portabolsas que tiene en la punta del asiento, así como la pequeña guantera con cierre y capacidad para llevar un smartphone cargando mientras vamos de un lado a otro, aprovechando su toma USB.  

Opinión y valoración

El Kymco Like 125 ha regresado con argumentos muy mejorados, comenzando por lo que se ve, ya que estéticamente ha ganado en la sensación de calidad que transmite, proponiendo muchos toques de diseño en su concepto retro.

Precisamente constituye una buena opción a los que no se pueden permitir lo que cuesta, por ejemplo, una Vespa 125 que efectivamente es un vehículo de más calidad pero notablemente más costoso.

A su favor, el Kymco Like 125 ofrece estilo, un buen comportamiento general y un motor que sin ser un prodigio de prestaciones, es capaz de satisfacer nuestras necesidades urbanas desde un punto de vista más ecológico; apenas suena, apenas vibra y consume poco.

Al ser un scooter ligero, de conducción muy intuitiva, es ideal para el público que busca una alternativa a los atascos sencilla y asequible pero con encanto. A esos yo les pediría un “like” para el nuevo scooter neo-retro de Kymco cuyo precio de venta es de 2.599 € y además incluye un año de seguro obligatorio con cobertura de robo.  

Galería presentación Kymco Like 125