Zontes sigue a lo suyo, sorprendiendo con la frescura de sus motos llegadas directamente desde China y que están dibujando una imagen muy diferente de lo que hasta ahora teníamos en mente con el “made in China”. A nosotros no nos ha pillado desprevenidos ya que habíamos podido probar la Zontes R-310, una moto con la que comparte lo más importante: motor y parte ciclo. Pero a cualquiera que no las conozca le sorprenderán, sobre todo teniendo en cuenta el precio.

Y la opinión favorable que nos habíamos hecho acerca de la variante naked ha tenido una lógica continuación con esta hermana de estilo adventure. A pesar del diseño modular que ha planteado Zontes y con el que ha creado una pequeña familia (R, X y T), hay retoques en las tres diferentes recetas para que cada una puede tener las peculiaridades asociadas a su estilo sin que se resienta su rendimiento en ningún aspecto. Por eso, en esta caso concreto, varían algunos anclajes del chasis, la distancia entre ejes (debido a la suspensión de mayor recorrido) así como la altura del asiento y la posición del manillar.  

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Adventure premium a escala

La receta Adventure a escala está recreada con bastante acierto en todos los sentidos, con el añadido de un toque tecnológico muy innovador que le da un fuerte carácter a esta Zontes T-310. Los elementos están todos presentes sin absolutamente ninguna ausencia: pantalla (regulable), defensas, pico de pato, protectores de manetas, anclajes laterales para maletas, plataforma trasera, ABS desconectable y neumáticos mixtos. Incluso lleva un cubrecárter de plástico, válido para proteger de las piedras que salgan despedidas desde la rueda delantera, pero no como proteger de un impacto fuerte contra una roca.

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Y a esto suma la instrumentación estilo pantalla TFT, el arranque sin llave, el bloqueo electrónico de la dirección, las piñas retroiluminadas o la apertura remota tanto del asiento como del depósito de gasolina, como indiscutibles rasgos de moto premium que no llega a 4.500 €.

Pero esto no es todo...tiene otra interesante aportación que a día de hoy no encontramos en ninguna otra moto del mercado: el sistema de hibernación de su batería de litio. Ya no es que aporte una batería mucho más pequeña y ligera de lo habitual sino que además cuenta con un sistema que monitoriza la carga y cuando detecta alcanza un límite mínimo tras un tiempo sin uso, se desconecta totalmente para salvaguardar el resto y así permitir a la moto arrancar aunque hayan pasado dos meses desde la última vez que estuvo en funcionamiento. Para que la moto pueda cobrar vida de nuevo dispone de un botón situado en la parte izquierda, a la altura del cambio, que al presionarlo enciende una luz verde y permite que vuelva a arrancar. Por supuesto solo funciona con la llave de proximidad cerca, por lo que hay ningún peligro en este sentido.

zontes t 310 presentacion accion texto 3Otro elemento que llama la atención es la instrumentación que cuenta con bastante información y la despliega en un formato muy vistoso. No es una pantalla TFT pero la simula muy bien y refrenda ese aura tecnológico que tiene todo el conjunto. Y en su parte inferior ofrece una pequeña guantera de cierta utilidad y bien camuflada. También tiene toma USB.

La iluminación totalmente por LED también aporta mucho en este sentido y, junto a su anguloso y atrevido diseño, conforman una moto de aspecto muy vanguardista y original.

Motor y parte ciclo a la altura

En cuanto a la motorización, sus 35,4 CV la sitúan en un interesante punto medio entre las más potentes y grandes del segmento como por ejemplo la Benelli TRK 502 X o la Honda CB500X que apuran hasta los 47 CV, y otras más discretas en este apartado como la Suzuki V-Strom 250 (24,7 CV) o la Royal Enfield Himalayan de 24,5 CV. Por su parte, la Kawasaki Versys-X 300 cuya potencia es de 39 CV y la BMW G 310 GS se alinea en potencia con sus 34 CV.

La mecánica cuenta con importantes avances que la hacen de muy moderna concepción y que básicamente busca ofrecer un buen rendimiento con la máxima suavidad de funcionamiento y un consumo de combustible moderado. Veremos más adelante como la ecuación la despeja con brillantez...Además ofrece dos modos de funcionamiento, uno denominado ECO en el que la aceleración es más progresiva y el modo normal o Sport.

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Entre las características técnicas más llamativas del motor, cuenta con doble árbol de levas y 4 válvulas, lubricación por cárter seco y dos bombas de engrase, dos radiadores y eje de equilibrado para mantener las vibraciones al mínimo. Además tiene la particularidad de que el tubo frontal del bastidor también sirve como depósito de aceite y una de las bombas hace que enfríe el aceite del motor. Por lo tanto vemos que Zontes se ha ocupado a conciencia de desarrollar una mecánica propia con peculiaridades técnicas adaptadas a la filosofía de sus motos.

En la parte ciclo destaca la horquilla invertida delantera junto al monoamortiguador trasero sin regulación y a un bastidor tubular de acero. Un ABS suministrado por Bosch se encarga de apuntalar la seguridad activa y forma equipo con una pinza delantera de freno convencional.  

Los neumáticos mixtos son radiales y están suministrados por la empresa china CST pero el tacto parece gomoso, veremos qué tal se comportan en plena acción.

Dinamismo trail

Y sin más preámbulos comenzamos la ruta con la Zontes T-310 que nos iba a llevar por carreteras secundarias repletas de curvas y también por alguna que otra pista.

Arrancamos y el monocilíndrico despierta con discreción en todos los sentidos, permitiéndonos analizar con tranquilidad la posición a los mandos; las estriberas están en el mismo lugar que en la versión naked y sport-turismo, y esto hace que la postura tenga un ligero componente deportivo, ya que están un poco retrasadas y elevadas. También es igual el depósito de combustible de 15 litros que promete una buen autonomía para una moto de estas características.

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Pues bien, a los mandos uno se siente muy integrado en el conjunto gracias en buena parte al asiento que cuenta con generosas dimensiones (buen mullido) y es estrecho en la unión con el depósito, lo que hace que lleguemos al suelo con extrema facilidad a pesar de los 830 mm que está situado. Además dibuja un respaldo y también reserva un buen espacio para el acompañante que dispone de buenas asideras donde agarrarse. El manillar ancho y elevado hace que todo se plantee con naturalidad, sin forzar extremidades.

Con esta postura tan cómoda que nos evoca a la típica de una moto trail comenzamos a rodar para corroborar lo que ya sabíamos. Es un motor todo dulzura en cuanto a vibraciones y respuesta, ya que el empuje lo obtenemos de forma lineal pero esto no le impide subir rápido de vueltas como buen “mono” que es.

Por tanto la conducción es animada, ya que este pequeño motor transmite lo necesario y resulta perfecto para los que no tienen demasiada experiencia. Zontes anuncia solo 3,2 l./100 km y una velocidad punta de 160 km/h. ¿Se puede pedir más?

Los movimientos en las primeras rotondas antes de abordar las carreteras que nos esperaban me sorprendieron un poco. Y es que la dirección transmitía una sensación de poca precisión que no había notado en su hermana, la R-310. El mayor recorrido de la horquilla que varía las geometrías de la moto es el responsable de este efecto que parece hacerla flotar ligeramente y que además se ve acompañado de un carácter sobrevirador que busca casi de forma autónoma el interior de la curva.

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Es cuestión de hacer una rápida adaptación porque estas sensaciones iniciales fueron dando paso a una mayor sensación de seguridad y aplomo según iban pasando los kilómetros, mientras íbamos disfrutando no solo del confort general sino de elementos como la cúpula regulable de forma eléctrica en dos posiciones.

Dinámicamente responde muy bien a nuestras insinuaciones, posibilitando cambios de dirección muy rápidos en los que la suspensión transmite buenas sensaciones

El motor que tan bien funciona a bajas revoluciones muestra un medio régimen muy competente, donde encontramos el empuje necesario para disfrutar en carretera. Y en los tramos de autovía todavía tiene el desarrollo necesario para circular con solvencia, mostrándose agradablemente versátil.

Los frenos que en la R-310 nos habían parecido muy solventes, en la T-310 lo siguen siendo pero al actuar en una horquilla con mayor recorrido pierden algo de eficacia; la sensación es que no “muerden” con la misma potencia ni tampoco ofrecen el tacto de su hermana, mucho más contundente cuando accionamos la maneta. Por cierto, ambas son regulables y muy vistosas ya que proceden de bloques mecanizados, como muchas partes de la moto, algo que le da un indiscutible toque extra de calidad.  

Al ser una moto más bien corta entre ejes (1.400 mm) y ligera (150 kg en seco), dinámicamente responde muy bien a nuestras insinuaciones, posibilitando cambios de dirección muy rápidos en los que la suspensión transmite buenas sensaciones; ambas cuentan con el reglaje casi diría que ideal para resultar cómodas y a la vez no ser rebotonas para poder gestionar los poyos fuertes y los baches con la consistencia necesaria, haciendo así que la rueda delantera siempre transmita solidez y confianza.

Las pistas que pisamos apenas revestían dificultad por lo que más allá de comprobar que podemos ir con ella sin problema gracias a las gomas mixtas, pocas conclusiones se pueden sacar, salvo que es una moto a la que le gusta mucho más la cinta negra de asfalto. En ambos casos los neumáticos se comportan dignamente pero sin alardes. 

Opinión y valoración

La Zontes T-310 es una moto muy bien armada en todos los sentidos y los 4.495 € que cuesta no hacen sino amplificar todos sus encantos ya que es de lejos la moto más económica de este tipo. Sin duda se trata de un desafío a la competencia ya que además ninguna está en condiciones de ofrecer el arsenal tecnológico y de equipamiento como del que hace acopio la T-310.

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El diseño es muy particular y otra de las bazas que juega porque resulta de lo más actual. Los acabados y materiales también están en consonancia con el resto, proyectando una imagen general muy aseada.  

El apartado dinámico, apoyado en un motor muy solvente y una equilibrada parte ciclo que permiten disfrutar de la conducción, es otro de los aspectos destacables de una moto que sin duda merece una oportunidad por parte de cualquiera que tenga en mente comprar una moto trail de corte económico para el carnet A2.

Galería presentación Zontes T-310