Piaggio quiere reforzar su posición de liderazgo en este mercado tan especial que es el de los scooters de tres ruedas, pues aunque sea minoritario ha reportado a la marca italiana más de 230.000 unidades desde su lanzamiento; un aporte nada desdeñable a su facturación teniendo en cuenta el alto precio de estos vehículos. Y una vez más se sitúa a la vanguardia apostando por la más avanzada tecnología jamás vista en un scooter de este tipo. Y fuimos convocados en la capital francesa, pues es la ciudad del mundo donde más triciclos se ven por sus calles, regalándonos una buena ración de lluvia para así poder probar el nuevo MP3 en las mejores condiciones.  

Nueva gama y mucha tecnología

Además refresca la gama al presentar dos nuevas motorizaciones, ya que el anterior 350 HPE para a ser el 400 HPE, logrando una potencia máxima de algo más de 35 CV. Y el motor de 500 sube de cilindrada hasta los 530 cc, dando el nombre al modelo y estableciendo una cifra de 44 CV de potencia.

La nueva familia queda formada por tres versiones: Piaggio MP3 400, MP3 400 Sport y Piaggio MP3 530 Exclusive. La versión más deportiva del 400 presenta una estética al más fresca y juvenil gracias a elementos como las pinzas de freno en rojo, las costuras del asiento en el mismo tono y una gama de colores menos convencional. Además incluye la conectividad que el 400 no ofrece de serie. Y el 530 es el tope de gama en todos los sentidos y el más caro de todos. 

Como estamos ante vehículos totalmente renovados, hay mucho de lo que hablar pero como no quiero aburrirte, te remito a nuestra ficha técnica donde está absolutamente todo detallado. Yo te voy a concretar lo que para mí es más importante, aunque toda evolución por pequeña que sea, suma en ese ambicioso objetivo de ser el scooter de tres ruedas más avanzado y apetecible del mercado.

Por eso no solo se ha refrescado a fondo su estética, en la que la iluminación delantera tiene un nuevo carácter gracias al diseño de los LED y la luz de día (DRL), sino que hay mucho que no se ve y tiene gran importancia, como el nuevo chasis, el sistema de dos ruedas delantero revisado o los frenos mejorados. Pero quizás la tecnología es lo que marca un gran punto y aparte y todo está concentrado en una pantalla TFT de siete pulgadas, un tamaño ya considerable que permite solo ver todo muy bien sino poder visualizar sistemas tan importantes como la cámara trasera o la detección de vehículos en ángulo muerto, para lo que lleva un radar trasero instalado. Y estos son sin lugar a dudas los sistemas estrella de esta nueva generación.  

Más electrónica y seguridad

Los mayores avances vamos a poder solo disfrutarlos en el modelo tope de gama, el 530 Exclusive, que de este modo se convierte en el objeto de deseo de los más sensibles a la seguridad y la tecnología. Y es que este modelo aglutina lo mejor que Piaggio ha sido capaz de desplegar en estas dos materias pues incluye hasta tres diferentes modos de conducción (Eco, Comfort y Sport), mientras que en los 400 solo disponen de dos (Normal y Sport). Y estos modos permiten dos diferentes niveles de actuación del control de tracción denominado ASR. No olvidemos que además contamos con llave de proximidad y control de velocidad de crucero, dos detalles que suman todavía más sentido práctico y comodidad.

Mención especial creo que merece el haber prestado atención al ingenioso sistema de las dos ruedas delanteras, cuya eficacia ha sido la base de su éxito desde su lanzamiento en 2006. Y es que el doble paralelogramo articulado cuenta con piezas diferentes que hacen la misma función pero logran rebajar el peso y de paso incrementar la sensación de aplomo y agilidad. En definitiva se ha buscado una todavía mayor naturalidad de movimientos a lo que también contribuye un ahorra de 7 kilos de peso. Aún así estamos ante dos pesos pesados: 260 kg el 400 y 280 kg el 530. Veremos si esto pesa lo que parece una vez en movimiento.

También se ha buscado más hueco para los pies, algo necesario especialmente en el pie derecho, donde está el pedal obligatorio de freno combinado debido a su homologación como triciclo. Y se mantiene un hueco bajo el asiento para dos cascos integrales, algo súper útil y muy valorado por los usuarios. Además está cuidado porque ofrece revestimiento interior y luz de cortesía. Como apoyo contamos con un gancho portabolsas retráctil y con una guantera que está sobre la instrumentación y protegida por la pantalla parabrisas. Es alargada y de dimensiones aprovechables pero no tiene cierre de seguridad, aunque sí toma USB.     

Piaggio MP3 530 Exclusive en acción

Por fin me subí al scooter cuando justo comenzaba a llover sobre París. Una circunstancia por un lado mala pero por otro no tanto, ya que me iba a permitir evaluar a fondo la seguridad que aportan esas dos ruedas delanteras. Recordar a los que no conozcan bien el modelo que aparte de contar con una frenada más segura gracias las dos ruedas y una estabilidad duplicada frente a un scooter convencional, que una de las gracias del sistema es que se puede bloquear desde un botón en la piña derecha cuando vamos circulando a menos de 10 km/h, momento en el que libera un sonoro “beep” para avisarnos de que está bloqueado. Esto le permite permanecer vertical y de este modo, cuando le cogemos el truco, no tendremos que apoyar los pies al detenernos en un semáforo. También posibilita estacionarlo sin tener que armar el caballete e incluso moverlo en parado empujándolo. Es realmente útil porque también tenemos un freno de estacionamiento para inmovilizarlo. Además cuenta con un pomo rediseñado que lo hace más ergonómico.

Comencé la jornada con el 530 Exclusive porque realmente es el que más interés me despertaba, no solo por montar el monocilíndrico de mayor cubicaje fabricado por Piaggio, sino también porque podía disfrutar de todos los avances que ofrece este súper dotado de la tecnología y la seguridad. Al posicionarte y tomar contacto con el puesto de conducción rápidamente te percatas de la calidad de fabricación de este vehículo. A la vista y al tacto transmite mucho mimo en su ensamblaje y en los materiales empleados. Las nuevas piñas con muchas funciones encajan a la perfección en este espíritu premium del MP3. Te sientes muy resguardado por una carrocería envolvente en perfecta alianza con una pantalla parabrisas de generoso tamaño.

Me sorprendió que el arranque fue muy suave, con gran discreción en lo que a sonido se refiere. Comencé a rodar y rápidamente me vinieron a la cabeza todos los MP3 que probé desde su lanzamiento. Es una sensación extraña al principio tener dos ruedas delanteras pero te habitúas rápidamente. Incluso la impresión que tuve desde el primer momento es que funciona todavía mejor, resultando más natural, tanto que puedes llegar a olvidarte de que delante van dos ruedas y no una. Esto es importante porque el ancho de vías delantero te condiciona al pasar por espacios pequeños y tienes que ser muy consciente de esa limitación, sobre todo al principio.

El motor seguía sorprendiéndome con una dulzura en la respuesta absoluta, con unas vibraciones perfectamente controladas, algo nada fácil en monocilíndricos tan “gordos”. Y además cuenta con un empuje lineal y decidido, sin fisuras apreciables y evidenciando una buena puesta a punto con la transmisión. El tacto al acelerador electrónico es definitivamente agradable porque se dosifica a la perfección.  

Máxima confianza y estabilidad

Caía tanta lluvia que la circulación era un poco delicada pero la confianza que infunden esas dos ruedas delanteras es muy de agradecer. Puedes ir más rápido que con un scooter convencional sin ningún género de duda y siempre con una seguridad activa amplificada. Una de las cosas que más sorprenden es que con 280 kilogramos entre las piernas, la conducción resulta bastante sencilla.

El scooter se mueve con naturalidad y zigzaguea de forma resuelta siempre y cuando tengamos en cuenta sus cotas pues estamos ante un vehículo voluminoso. Y siempre disfrutamos de un par de 50 Nm a solo 5.520 revoluciones que nos impulsa con mucha rapidez en cualquier situación. De hecho cuenta con unas prestaciones en terreno abierto realmente altas que Piaggio cifra de forma oficial en 145 km/h. Esto le capacita para lidiar con cualquier tipo de desplazamiento tanto por carretera como por autovía. De hecho es un vehículo con el que te puedes plantear viajar aprovechando el confort de marcha y el mencionado el control de velocidad de crucero que ofrece de serie este MP3 530 Exclusive.

Por supuesto que probé la marcha atrás que se acciona desde la piña izquierda, un recurso que resulta tan práctico como diferencial. Al accionarla el primer golpe de gas resulta muy brusco. No está lograda la respuesta aunque una vez pasado ese momento empuja despacio y con total seguridad. Lo bueno que que gracias a la cámara trasera podemos maniobrar con total confianza porque en la parte derecha de la instrumentación se abre una pantalla en la que se con mucha claridad lo que hay detrás. Incluso tiene unas líneas de colores que nos marcan la proximidad de los objetos.

Otro elemento estrella es el detector de ángulo muerto que está basado en un radar con capacidad para monitorizar vehículos aproximándose por la parte trasera y los laterales, incluso por encima de los 25-30 metros de distancia. Cuando lo hace se enciende en los laterales de la instrumentación un aviso amarillo en forma de un triángulo alargado para avisarnos de la presencia de vehículos. De este modo podremos cambiar de carril de forma más sencilla. Esta funcionalidad es desconectable porque en ciudad va a estar continuamente avisando y puede resultar pesado. Pero no hay duda de su utilidad. Creo que podría haberse resuelto mejor teniendo en cuenta la tecnología que precisa, porque el aviso amarillo no está a la altura de tanta sofisticación.

Otro de los aspectos que me llamó la atención fue el hecho de comprobar cómo esta nueva generación del MP3 frena aun mejor. De hecho se han montado bombas de la filial de Brembo, Bybre, y tenemos una retención con más tacto y la potencia de la que siempre ha hecho gala. Además tenemos la opción de freno combinado en el rediseñado pedal que garantiza una retención instantánea, aunque con el pie no se tiene mucho tacto y la respuesta es un poco brusca. Lógicamente cuenta con ABS que además está conectado con el sistema ASR que es el de tracción, apuntalando el marcado sentido de la seguridad del MP3.

MP3 400 en acción  

También pude probar el MP3 400 que tiene dos diferencias fundamentales con el 530: 9 CV menos y 20 kilos menos de peso. Como comparten chasis, suspensiones, frenos, etcétera, las sensaciones a los mandos son calcadas, ofreciendo un control intuitivo y fluido del vehículo en cualquier situación.

El motor es también súper agradable, con buen rodar y un funcionamiento muy afinado. Es una de las referencias indiscutibles de la categoría porque el rendimiento está a buen nivel, moviendo con solvencia los 260 kg que pesa.

Te comento ahora las suspensiones que no lo había hecho con anterioridad y que son idénticas a las del 530. Delante no tienen mucho recorrido pero el suficiente para filtrar bien las irregularidades, son algo secas pero no incómodas. Y detrás una pareja de amortiguadores se encarga de hacer el trabajo se forma similar, correcta.

Quedó patente que al salir a la autovía el motor tiene menos que ofrecer a máximo régimen pero más que suficiente para lidiar con los coches de forma convincente. Mantener un crucero de 120 km/h lo hace con sumo desahogo, lo cual es perfecto para la ciudad y alrededores. Y no es una mecánica “tragona” pues se anuncian solo 3,8 l/100 km.  

Conclusión y precio

Como afirmaba al principio, Piaggio no está dispuesta a ceder ni un milímetro de terreno a todos los imitadores que le han salido a lo largo de lo años. El más duro ha sido el Peugeot Metropolis 400 que además en Francia, el país de los triciclos, cuenta con una ventaja añadida, pues nuestros vecinos "barren para casa" como pocos. De hecho hay un importante pleito abierto por las patentes que supuestamente ha copiado Peugeot y que han sido denunciadas por Piaggio: esto evidencia que la lucha es dura porque el pastel merece la pena. Veremos cómo acaba...

Mientras, Piaggio no quiere que haya dudas sobre cuál es la referencia, además del pionero, y por eso ha lanzado un proyecto MP3 2023 súper ambicioso. No solo es el más seguro sino el más tecnológico, y también el más caro. Ojo porque el nuevo Piaggio MP3 530 Exclusive cuesta nada menos que 12.999 €. Al menos se ofrece la opción de sus hermanos que rebajan esa cifra pero a costa de tener menos motor y un equipamiento más reducido. El MP3 400 tiene un precio de 10.499 € y el MP3 400 Sport vale 10.999 €. Desde luego van dirigidos a un público con cierto poder adquisitivo que está ya muy harto de los atascos y que aprecia mucho la seguridad extra que proponen, y más en esta útima generación.

Piaggio ha hecho un esfuerzo encomiable en materia de diseño y tecnología, elevando mucho el listón, aunque también en lo económico. Pero es el precio a pagar por incorporar unos sistemas tan avanzados. La cuestión es:¿Merece la pena comprar el triciclo de los triciclos? Es decir, el MP3 530 Exclusive. Desde luego es cuestión de dinero y prioridades, pero si de lo primero no tienes problema yo me lo compraría porque no hay nada mejor en el mercado. Pero si buscas que haya lógica en tu compra, con el MP3 400 tienes lo importante en materia de seguridad y te ahorras nada menos que 2.500 €. Esto es siempre una cuestión muy personal. De lo que no hay duda es que pocas pegas se le pueden poner a un scooter planteado de una forma sumamente conciezuda gracias a la evolución que ha tenido a lo largo de los últimos 16 años. Larga vida al MP3. Y sí, me mojé mucho pero disfruté de una sensación de seguridad fuera del alcance de los scooters de dos ruedas.