DATOS TÉCNICOS, EQUIPAMIENTO Y GALERÍA >

En positivo

  • Aceleración
  • Ágil y estable
  • Económico

En negativo

  • Espejos retrovisores
  • Poca proteccion
  • Hueco justo para un integral

 

 

 

Siempre fue un scooter especial caracterizado por sus ruedas de balón con tacos y tuvo un enorme éxito en la década de los noventa, tanto, que se mantuvo hasta finales de 2010 prácticamente igual. Se caracterizó siempre por su carácter aguerrido en todos los aspectos, incluido el mecánico. Y eso era muy importante para un chaval de 15 años que contaba únicamente con los escasos recursos que le daban sus padres.


La nueva generación Typhoon luce una estampa rediseñada por completo pero sin perder su esencia y da el salto también a 125 cc, la cilindrada de moda en detrimento de los 50 cc, denostados por las administraciones y casi olvidados por una juventud que antes suspiraba por su primer Vespino, Derbi FDS, Yamaha Jog o Piaggio Typhoon, antes incluso de tener los 14 años reglamentarios para poder conducirlos. Una lástima...

Escurridizo

La nueva cilindrada del Typhoon implica la utilización de una moderna motorización del grupo que lo hace bastante veloz, destacando sobre todo en las aceleraciones porque la punta real ronda los 100 km/h. Y además es un motor cuyo tacto es suave y consume combustible de manera razonable; unos 4,3 litros a los 100 km. Se trata de un propulsor refrigerado por aire con 9,6 CV de potencia declarados y cuya alimentación se hace mediante carburador.


Para ciudad el Typhoon es un auténtico arma para combatir la masificación de coches, autobuses, camiones, furgonetas…y salir airoso de los reducidos espacios en los que nos obliga a movernos el indigesto tráfico urbano. Ágil, ligero, rápido, se tiene muy bien sobre la horquilla telescópica y el único amortiguador trasero pero alguna pega tenía que tener, y son los retrovisores que incomprensiblemente sobresalen mucho del ancho y nos los vamos jugando constantemente, algo que nos impide pasar siempre por los recovecos más angostos aprovechando al máximo las estupendas cualidades dinámicas y el reducido tamaño del Typhoon 125.

Integral con calzador

En el terreno práctico ofrece el máximo teniendo en cuenta sus pequeñas dimensiones, incluso es capaz de dar cabida bajo el asiento a un casco integral, aunque con algunas dificultades porque hay que forzar mucho el asiento. También tiene una guantera con llave pero ojo con lo que guardamos ahí dentro porque se puede abrir muy fácilmente sin la llave. El gancho portabolsas y la plataforma plana son otros dos importantes elementos a la hora de llevar bultos y bolsas con nosotros.

Económico y diferente

El Typhoon destaca por su estética que plantea un concepto híbrido entre los scooters urbanos más compactos pero que también pueden circular por algún camino fuera del asfalto gracias a sus ruedas mixtas. El Yamaha BW’s 125 que ya probamos en Motofichas (ver prueba) encarna un concepto idéntico basado en una estética también muy original. Ambos son scooters sin pantalla parabrisas y con una superficie frontal de protección mínima que los hace ideales para movernos en entornos urbanos. Y el equipamiento es muy básico; por ejemplo en el Typhoon la instrumentación es muy elemental con tan sólo el velocímetro, el contador total de kilómetros y el indicador del nivel de combustible con el testigo de reserva.


El carácter básico va en consonancia con el precio, pues los 1.999 € que cuesta son muy razonables si tenemos en cuenta la calidad del producto y su eficiente motorización. Detalles como el freno de tambor trasero denotan su esencia “low cost” pero nada se le puede reprochar en este aspecto, pues junto al pequeño disco delantero, ofrece una frenada segura. El pasajero cuenta con asideras y sus reposapiés están integrados en la plataforma. No tiene un espacio excesivamente amplio pero sí suficiente, igual que el piloto que a pesar del compacto tamaño del Typhoon dispone de un puesto de conducción cómodo y los suficientemente amplio, incluso aunque sea de tamaño grande.