Tras haber vendido 60.000 unidades en seis años, el Satelis pedía a gritos una evolución para no quedarse atrás frente a la competencia. El Satelis 2 supone un cambio a mejor en todos los aspectos, sobre todo en los que necesitaba mejorar, y eso es lo importante de esta nueva generación.

Sin romper en absoluto con el camino marcado por su predecesor, estamos ante un producto más maduro, incluso en calidad, algo que se nota simplemente a la vista y el tacto. Los plásticos, materiales así como el ajuste de todo evidencian un paso adelante en la fabricación del scooter. Mantiene el chasis y las suspensiones, todo un acierto porque no se podía reprochar nada en este aspecto. Y a ello se suma el potente motor del Citystar y un equipo de frenos que siendo ya excelente ha recibido mejoras en el sistema integral con sistema antibloqueo ABS/SBC, desarrollado esta vez junto a Nissin.

Muchos cambios

Con un 80% de las piezas nuevas y una parte ciclo prácticamente idéntica, casi todas las novedades se han centrado en la nueva carrocería, el equipamiento y la ergonomía. Ahora se presenta con formas más suaves pero sin perder el patrón de diseño original; lo cierto es que le sienta muy bien huir de marcadas aristas para ganar en elegancia sin perder el vanguardismo de sus líneas, un matiz realzado por la utilización de leds, tanto en el frontal como en la zaga; un detalle tecnológico muy vistoso y eficaz para aportar más visibilidad a unos grupos ópticos que ganan un 35% de iluminación.

En la ergonomía hay dos aspectos muy importantes mejorados por el nuevo Satelis: la pantalla parabrisas y el puesto del pasajero. Eran dos puntos con margen de mejora y se ha hecho gracias a la instalación de una nueva pantalla más fina y mejor posicionada. El asiento del pasajero se ha rebajado un poco (15 mm) porque estaba altísimo y además el apoyo de los pies ha cambiado de las estriberas integradas, algo incómodas, a unas extraíbles para lograr una postura menos forzada.

El hueco del asiento también ha logrado mejorar en espacio, algo que parecía difícil teniendo en cuenta lo grande que ya era, con capacidad para dos cascos integrales. Se ha ganado un 12% principalmente localizado en su parte más profunda, donde antes llevaba un depósito de aceite. Además cuenta con un suave revestimiento para evitar que se rallen los cascos u objetos alojados en su interior. También se aporta una luz de cortesía que tanto se agradece por las noches o en un garaje. Y por último, ahora también cuenta con un mecanismo de apertura alternativo al del bombín o el mando a distancia opcional; se encuentra junto al tapón de la gasolina, al que se accede mediante una llave pero es una tapa más fácil de forzar en caso de habernos dejado la llave en el hueco, y mucho más barata que romper el asiento o alguna otra tapa.

Nuevo motor, excelencia en la frenada

Una de las diferencias principales reside en el motor, pues recurre a lo más nuevo de la casa para sustituir al anterior, sofisticado, potente pero menos eficiente en cuanto e emisiones, consumo y prestaciones. Se trata del nuevo 125i LFE (Low Friction Effiency) que ya hemos podido probar otras veces en el Citystar, el modelo que lo estrenó. Es un motor sofisticado con una tecnología que también Honda aplica a sus últimos modelos de scooters: mínimo rozamiento para minimizar las pérdidas de potencia con detalles como los árboles de levas sobre rodamientos o los basculadores también sobre rodamientos. Peugeot afirma alcanzar el límite de los 15 CV de potencia permitida por la licencia para este tipo de scooters que se conducen con el carné de coche y más de tres años de experiencia. También da como cifra de consumo 3,6 l/100 km, algo muy positivo para el bolsillo y la autonomía que sobrepasaría muy ampliamente los 300 km por depósito. Por cierto la nueva instrumentación  no sólo informa del consumo medio e instantáneo sino también de la autonomía restante…ya era hora de que alguien lo hiciese en un scooter.

El funcionamiento del motor es alegre, con pocas vibraciones y ruido. La conexión con el variador es buena, se ha logrado un tacto fino y agradable para circular con fluidez en ciudad. A esto ayuda la agilidad y buenas maneras heredadas del modelo anterior, pues el chasis es el mismo y las geometrías son idénticas o casi, porque se mueve igual de bien. También muestra el mismo buen aplomo gracias a su llanta delantera de 14 pulgadas que pisa con toda confianza apoyada en unos neumáticos con muy buen agarre. Dinámicamente se sigue comportando bien por ésa facilidad de manejo y sensación de ligereza, perfectamente asistidas por su vivaz motor y un equipo de frenos que con o sin ABS/SBC, se muestran sumamente eficaces.

Pero hablemos del nuevo sistema antibloqueo que Peugeot ha instalado junto a la frenada combinada en el nuevo Satelis. La potencia de frenado siempre ha caracterizado a este scooter pero en la versión anterior carecía de sistema combinado en la maneta izquierda y el ABS era un tanto brusco aunque súper seguro. Los componentes eran Nissin pero Peugeot se había encargado de desarrollar el sistema; ahora lo ha hecho en colaboración con la empresa japonesa. El resultado es un sistema más progresivo con sensores en ambas ruedas y que actúa de forma simultánea en las dos cuando accionamos la maneta izquierda. Si usamos la derecha tenemos un funcionamiento normal, actuando sólo sobre el disco delantero, con buen tacto y generosa potencia.

Es decir el nuevo Satelis gana en aspectos muy importantes sin perder absolutamente nada del carácter y la identidad que le han hecho un hueco en el mercado junto a los mejores scooters. Y por precio ahí se posiciona, pues costará 3.999 € a los que añadimos 500 € más para adquirirlo con el sistema ABS/SBC. Como antes, se puede optar por varios niveles de equipamiento, City, Premium y Exclusive, así como por un sinfín de accesorios originales. Estará disponible en junio 2012 en cuatro colores: blanco, negro, gris y champán.

Por cierto, es la punta de lanza porque se avecinan dos más; uno para finales de año, el Satelis 300 impulsado por motor Piaggio. Y dentro de un año que montará un motor propio de 40 cc que estrenará próximamente en el Metropolitan de tres ruedas.