Las bicicletas con motor eléctrico están cada vez más de moda y ya no resulta extraño toparse con una de ellas durante un simple paseo urbano. Esta pasada semana Audi presentó un “concept bike” muy sofisticado, realizado con los materiales más avanzados y caros así como dotado de un sistema de conexión a un SmartPhone que permitiría ofrecer nuevas posibilidades de diversión a su propietario.

La verdad es que después de comprar Ducati (ver noticia), que Audi presente un prototipo de dos ruedas aunque sea una bicicleta tiene como algo más interés, si bien no es la primera vez ni mucho menos que la marca de los aros crea algo así. Esta vez lo cierto es que han echado el resto y la Audi E-bike Wörthersee presume de emplear lo más sofisticado de la tecnología Audi en tres líneas que para el fabricante son esenciales: la construcción ligera (Audi ultra), la propulsión eléctrica (Audi e-tron) y la introducción de la conexión a redes desde el vehículo (Audi connect).

audi-e-bike-p1La Audi E-bike Wörthersee es ligera gracias a los materiales empleados, en especial la fibra de carbono que se usa profusamente en el cuadro, el basculante y las llantas de 26 pulgadas con radios de diseño plano que al parecer favorecen la facilidad para pedalear y que reciben el nombre de Audi ultra blade. En total el peso de la bicicleta sin contar lo componentes eléctricos es de 11 kilos, lo que está en línea con una buena bicicleta de montaña, nada más. Es una pena que no se facilite el peso del conjunto con los componentes eléctricos (entendemos que motor y batería) porque son elementos bastante pasados. No obstante la cifra que han dado a conocer ayuda a hacernos una idea real de lo caro que sale aligerar un bastidor cuando ya normalmente está optimizado para resultar muy liviano. El sobrecoste del carbono sobre por ejemplo un aluminio de alto grado es hoy por hoy injustificable con respecto a sus ventajas comercialmente hablando, otra cosa es realizar un prototipo como este.

Otra de las características de la Audi E-bike es que cuenta con un motor eléctrico que no debemos menospreciar, ofrece unos excelentes 2,3 kilovatios de potencia, que equivalen a algo más de 3 CV y teniendo en cuenta el escaso peso del conjunto deben ofrecer prestaciones muy decentes. De hecho, en el vídeo que acompañamos y en el que el trialero Julien Dupont demuestra lo que es capaz de hacer con esta avanzada bicicleta, se puede comprobar cómo levanta la rueda delantera sin ningún esfuerzo y sortea obstáculos en desnivel con aparente facilidad. La batería se puede extraer de la bici para su recarga, algo en lo que tarda según Audi un máximo de dos horas y media.

Una característica muy interesante es que dispone de varios modos de funcionamiento: “Muscle power”, que como su nombre indica desconecta el motor y deja que sean las piernas del ciclista las encargadas de imprimir potencia a los pedales; “Pedelec” es el modo híbrido, en el que se suman la fuerza del pedaleo y la del motor eléctrico para desplazarse. Así se pueden llegar a conseguir velocidades máximas importantes (80 km/h… aunque esto depende de la potencia “animal”) pero suponemos que también mejores cruceros sostenidos, y alcanzar una autonomía entre 50 y 70 kilómetros. Si no queremos colaborar con nuestra e-bike y confiamos a ella todo el consumo de energía seleccionaremos el modo “eGrip”, con el que la carga de la batería evidentemente durará menos y que permite una más que razonable velocidad máxima de 50 km/h.

audi-e-bike-p2Y no sólo esto, gracias a un mando giratorio en el manillar se puede configurar el modo en que el motor entrega la potencia. Se pueden seleccionar diferentes programas, bien desde la propia pantalla de la e-bike, bien a través de una aplicación en el teléfono móvil. El modo "Power Wheelie" cuenta con diferentes niveles de ajuste para que incluso los menos expertos puedan realizar caballitos con facilidad. Y en el "Balanced Wheelie", para retos deportivos, el sistema de control electrónico ayuda a mantener el equilibrio del ciclista mediante la compensación de los movimientos hacia delante o hacia atrás utilizando el motor eléctrico. De esta forma, el ciclista puede influir en la velocidad cambiando el reparto de pesos: al inclinarse hacia delante se gana velocidad, y al hacerlo hacia atrás, se consigue un efecto de frenado. También hay un modo "Training" ideal para el entrenamiento.

El asiento puede deslizarse a lo largo de la viga superior del chasis, y ajustarse según las necesidades del "piloto". Además también puede ajustarse en altura para levantarlo con sólo presionar un botón situado en el manillar, consiguiendo así una postura de pedaleo más cómoda.

Desde la pequeña pantalla táctil se pueden controlar un gran número de funciones. Por ejemplo, el ciclista puede conectar su teléfono o dispositivo móvil a la computadora de la e-bike mediante WIFI, para desactivar la función de inmovilización. Y una cámara de vídeo integrada en el casco puede ir grabando imágenes de la ruta o las distintas acrobacias, que se transmiten en tiempo real a Internet a través de la conexión con el smartphone.

Un programa especial permite establecer competiciones en línea, y medirse con otros ciclistas o amigos: cada acrobacia recibe una puntuación que permite al ciclista ir subiendo de nivel. El ranking en Internet permite realizar un seguimiento de la evolución, y la pantalla de la Audi e-bike Wörthersee incluso muestra mensajes con los informes de estado que se van publicando en Facebook.