Su precio es de tan sólo 3.700 € y esto lo hace mucho más asequible que su hermano mayor pero aparte del precio tiene otras ventajas como el tiempo de recarga, la autonomía o las prestaciones. Y es que se recarga al 80% en tan sólo 3 horas y es capaz de alcanzar 65 km/h, posibilitando un radio de acción de 80 km.

Si tenemos en cuenta que este scooter está destinado únicamente a moverse por la ciudad, pequeños núcleos urbanos o incluso zonas de playa, todas estas cifras son casi ideales para un scooter eléctrico. Además el VX-2 tiene un consumo muy reducido, de tan sólo 0,4 € cada 100 km, vamos que moverse resulta casi gratis. Si a esto unimos que el mantenimiento de un scooter con motor térmico es inexistente ya que no hay filtros, aceite, etc, estamos ante un vehículo que a pesar de contar con un precio elevado, es perfectamente amortizable si tenemos en cuenta todo lo que nos ahorra a corto, medio y largo plazo. La batería es un elemento que va perdiendo capacidad de recarga pero el fabricante asegura que tras 300 ciclos de carga, todavía mantiene el 60% del nivel. Hay que tener en cuenta que un día habrá que sustituirla y el coste de la operación.

Dispone de un sistema patentado de frenada que permite reducir la velocidad y a su vez recuperar la energía para recargar las baterías, además de facilitar el aparcamiento gracias a la marcha atrás. La aceleración es de 0 a 45 km/h en 7 segundos, una cifra muy digna que permite moverse con soltura y seguridad.

El diseño es muy normal pero con ése toque fresco de los scooters orientados a un público joven. El faro delantero está hermanado con el de su pariente adulto, el Vectrix VX1. Los colores en los que se va a ofrecer el nuevo Vectrix VX2 son azul, rojo, amarillo, verde, blanco y negro; una gama de colores variada que no deja opción a que alguno no te guste si te agrada este pequeño y ecológico ciudadano.

La empresa importadora es Going Green y se puede contactar con ella a través de su página web www.goinggreen.es o del teléfono 901003838.