Tras haber conocido a esta pareja formada por un español y una macedonia, nos quedó muy claro que no les va la vida fácil sino los retos en el más amplio sentido de la palabra. Sin experiencia previa en moto, sin conocimientos de mecánica, sin apenas dinero ni planificación, incluso sin GPS, han logrado un sueño que muchos catalogaríamos de auténtica locura: recorrer 59 países por todos los continentes, invirtiendo en ello todo lo humanamente posible pero sin apenas recursos materiales, lo que les ha permitido disfrutar de un viaje de cuatro años sobre una Yamaha XT660 Teneré que compraron vendiendo artesanía en las turísticas Islas del Mar Egeo.

Otro detalle importante es que rara fue la noche que durmieron en un hotel, solían pernoctar en casas de gente que les acogía a su llegada, sin haber contactado previamente, poniendo otro puntito más de dificultad y emoción a cada día. 

Manu e Ivana son la demostración de que con empeño, ilusión y ganas de conocer mundo, todo es posible. Ahora que han finalizado su viaje, tuvimos la oportunidad de conocerlos durante su paso por Madrid y nos transmitieron esos valores que han disfrutado, no sin pasar muchas y variadas penurias, desde antes de empezar su viaje hasta el final. De hecho, tuvieron que lidiar con una rotura de tibia y peroné de Ivana en Chile que se vio obligada a viajar 5.000 km por el cono sur de América haciendo autostop al no poder subirse a la moto debido a la escayola.

Seleccionaron tres puntos por lo que iban a pasar pero no había mucha más planificación: Uluru (Australia), Ushuaia (Argentina), Deadhorse (Alaska). Pero todo comenzó con un pequeño viaje por Marruecos para aclimatarse a la conducción de la moto y a lo que sería el viaje durante mucho tiempo, pues Marruecos tiene una gran variedad de escenarios y sus carreteras cuentan con bastantes trampas. Posteriormente más del 40% de la ruta trascurriría por terreno sin asfaltar y siempre huyendo de autopistas para centrarse en carreteras secundarias, con mucho más encanto y también más peligrosas.

Desde sus primeros pasos el único patrocinador que se unió a ellos en la aventura fue Givi que les proveyó de bolsas y maletas para poder transportar todos sus enseres. Como el viaje se preveía muy duro, eligieron las Trekker Outback.

around gaia givi noticia 1

Su fabricación en lámina de aleación de aluminio de 1,5 mm de espesor con refuerzos de polímero reforzado en sus cierres y esquinas, otorga a las Trekker Outback una robustez inigualable, así como una gran resistencia a las inclemencias climátológicas y una impermeabilidad total frente al agua. Estas cualidades de aguante y estanqueidad convierten a estas maletas en idóneas para las rutas más difíciles y las condiciones más duras.

Y resistieron todo el viaje, demostrando una buena adaptación a un viaje de pura resistencia como este, que comenzaba en Sevilla con dos personas que han ido creciendo a base de conocer gente y descubrir lugares durante cuatro años, sin más propósito que el de vivir una experiencia enriquecedora e inolvidable.

around gaia givi noticia 4

around gaia givi noticia 2

around gaia givi noticia 3