La Triumph Speed Twin 900 es una de esas motos que, independientemente del estilo que te guste, hace que te pares a mirarla. Aunque hay gustos de todo tipo, en esta moto he encontrado casi unanimidad a la hora de hablar de su atractivo estético. Pero antes de hablar de la prueba de la Speed Twin, tengo que decir que antes solo había tenido contacto con una Triumph y fue muy breve, aunque con buenas sensaciones (era la Trident 660). Durante este tiempo, me crecía la curiosidad por probar otra moto de la marca al tener conversaciones con otros usuarios de motos que poseían Triumph. Su forma de hablar de ellas, con gran sentimiento de pertenencia y bastante orgullo, es algo que pocas marcas consiguen con sus clientes. Está claro que son motos con una fuerte personalidad y un marcado estilo, y es en esta prueba cuando he entendido el motivo de este “amor” hacia la marca británica.
Para comenzar, debes saber que la Speed Twin 900 es la sucesora de la Street Twin, solo que ahora cambia su nombre para ir en consonancia de la que es su hermana mayor en el catálogo de Triumph: la Speed Twin 1200. A pesar de este cambio en el nombre, la Speed Twin 900 mantiene la esencia con la que nació su predecesora: una naked de estilo clásico, sencillo y elegante que ofrece un gran comportamiento y versatilidad de uso, apta además para usuarios del carnet A2, perfecta para moverse con estilo en ciudad y en carretera.
Motor
Una de las claves de la Speed Twin 900 es su motor: un bicilíndrico cuatro tiempos refrigerado por agua que ofrece una potencia de 65 CV a 7500 rpm y un par de 80 Nm a 3800 rpm. Cuenta con una caja de cambios de 5 velocidades y un sistema de escape dos en dos de acero.
En cuanto nos pusimos en marcha, pudimos percibir su suavidad general, comenzando por la maneta de su embrague anti-rebote muy fácil se accionar y siempre precisa. Es un motor con mucho par desde bajas vueltas que hace que la conducción sea placentera y divertida, ofreciendo una gran seguridad en todo momento. A los pocos kilómetros con ella, ya sentía una enorme confianza. Aporta una muy buena respuesta y agradables sensaciones, siendo una de estas motos que conduces con una sonrisa bajo el casco. Su sonido también es un punto a favor, y es que emite un tono ronco y elegante, muy acorde a lo que esperas en una moto de este estilo.
La Speed Twin 900 también cuenta con componentes de calidad. El freno delantero lo confía a Brembo, contando con un disco de 310 mm y pinza de cuatro pistones. Detrás, lleva disco de 220 mm con pinza Nissin de dos pistones flotantes, además de contar con sistema ABS. En la práctica, a pesar de contar con un solo disco, nos ofrece una frenada potente, sin brusquedades y con buena dosificación. Sus suspensiones también hacen su trabajo correctamente, siempre teniendo en cuenta que en una moto de este tipo lo lógico es notar las irregularidades en mayor o menor medida, siendo este segundo caso el de la Speed Twin 900. En cuanto a neumáticos, calza unos Pirelli Phantom SportsComp, un neumático que ofrece un diseño de patrón de dibujo vintage y un gran rendimiento en carretera.
Ágil y cómoda
Otro de sus aspectos clave es el confort que percibimos gracias a sus dimensiones y ergonomía. A pesar de su buena presencia, las dimensiones de la Speed Twin la convierten en una moto ágil, manejable y accesible. Su peso en orden de marcha es de 216 kg, contando con una altura del asiento de 765 mm y una anchura del manillar de 780 mm. Esto la convierte no solo en una moto accesible para usuarios de cualquier altura y fácil de manejar en parado, sino también cómoda gracias a la posición de conducción que ofrece, erguida y natural.
Su agilidad también es un aspecto a destacar. Durante nuestra prueba con ella, no solo nos movimos con ella por el centro de una ciudad como Madrid, sino que además lo hicimos en pleno desfile del Distinguished Gentleman's Ride, un evento benéfico del que, por cierto, la marca es partner oficial desde el año 2014. Estas circunstancias pusieron de manifiesto lo adecuada que es para moverte en entorno urbano, incluyendo calles pequeñas y con tráfico, y esto tiene mucho que ver con esa llanta delantera de 18'' que le otorga una buena manejabilidad. Cierto es que al circular a baja velocidad y en un día de bastante calor, nos llamó la antención uno de los aspectos que mejoraríamos de ella: el calor que transmite su motor. A mayor velocidad y durante algunos meses del año, no solo no será molestia sino que durante el invierno puede que hasta lo agradezcas, pero con altas temperaturas sería preferible no percibir ese calor.
Estilo clásico
Un elemento que otorga a esta Speed Twin ese espíritu clásico es su instrumentación. Cuenta con un panel de una esfera con velocímetro analógico y una pantalla LCD que indica datos como el nivel de gasolina, marcha engranda o modo de conducción: road para el uso normal y rain para su uso en mojado. A través de un botón podrás cambiar otras informaciones que ver como las revoluciones, el consumo medio o si está activada o no la tracción, ya que es desconectable. Aunque en condiciones normales es una pantalla bastante sencilla que muestra la información con claridad, al incidir la luz del sol sobre ella cuesta un poco ver claramente en una vista rápida los datos. Para ofrecer esta imagen retro sin renunciar a la tecnología, la Speed Twin cuenta con una toma USB que en lugar de ubicarla en los mandos, algo que pueda restar un poco esa imagen clásica, esconde en su asiento.
Otro elemento clásico es el tapón de combustible, el cual una vez metida la llave hay que desenroscar y quitar por completo para repostar. Pensamos que con una bisagra quizás haría algo más cómodo el repostaje y evitaríamos tener que buscar donde dejarlo mientras echamos la gasolina. Y hablando de gasolina, tras finalizar nuestra prueba su consumo medio marcaba unos 4'8l/100km, teniendo su depósito una capacidad de 12 litros.
La Triumph Speed Twin 900 es una moto bastante redonda que puede ser la delicia de los pilotos más experimentados amantes de la estética clásica y elegante, hasta de los que no cuentan con tanta experiencia, ya que, como comentamos al principio, dispone de un kit que a limita para el carnet A2 y sus 47 CV pero pueden covertirse en 65 cuando se obtenga el permiso A. Además, una de las grandes virtudes de esta moto es su alta capacidad de personalización, por lo que si eres de esos que les gusta tener en su garaje una pieza única y a tu estilo, es un modelo muy adecuado para ti. La marca dice que algunos de los motivos para ponerse a los mandos de ella es que es una moto moderna, divertida y accesible, y la verdad es que no podemos estar más de acuerdo.
En cuanto a opciones de colores, está disponible en los denominados Jet Black, Matt Ironstone y Matt Silver Ice. Cuenta además con dos ediciones especiales: la Chrome Edition, que estará disponible solo durante el 2023 en un rojo cromado, y EC1 Special Edition, inspirada en el ambiente motero del East London.
El precio de la Speed Twin 900 es de 9.795 euros, mientras que el de la Chrome Edition es de 10.145 euros y el de la EC1 Special Edition es de 10.395 euros.
